Antes de que la pelota comenzara a rodar, fue el capitán Leandro Paredes en conjunto con Claudio Úbeda, quienes soltaron una camiseta de Boca con globos para recordar a Miguel Ángel Russo.
La familia de Miguel Ángel Russo fue testigo de todas las muestras de afecto hacia el entrenador de Boca, ya que fueron recibidos por Juan Román Riquelme.
Russo no solo fue campeón con Boca en 2007 y símbolo de la última Copa Libertadores ganada por el club, sino también representó una forma de vivir el fútbol con humildad, trabajo y respeto.
Como no puede ser de otra manera, en las tribunas de La Bombonera reinó la emoción. Desde la previa, los hinchas de Boca se dedicaron de lleno a homenajear la memoria de su DT.