Tras el entrenamiento y posterior almuerzo en el estadio Bautista Gargantini, el plantel de Independiente Rivadavia viajó a Córdoba donde este miércoles jugará la final de la Copa Argentina frente a Argentinos Juniors.
Tras el entrenamiento y posterior almuerzo en el estadio Bautista Gargantini, el plantel de Independiente Rivadavia viajó a Córdoba donde jugará la final de la Copa Argentina.
Tras el entrenamiento y posterior almuerzo en el estadio Bautista Gargantini, el plantel de Independiente Rivadavia viajó a Córdoba donde este miércoles jugará la final de la Copa Argentina frente a Argentinos Juniors.
Algunos hinchas saludaron al plantel en el Parque donde el clima entre jugadores y cuerpo técnico fue de mucha ilusión y expectativa en vistas del partido más importante de la historia de la Lepra.
"Con todas las ganas, con mucha fe, así es que esperemos estar a la altura y poder conseguir ese objetivo. Esperemos que que mañana sea el gran día y y salir y poder conseguir algo histórico para el club. Hay que estar tranquilo y tener la mente bien claro, sabemos lo que nos jugamos y esperemos hacer un buen trabajo mañana", indicó Alex Arce.
"Hay que estar tranquilo y ser conscientes de todo lo que se logró, así es que nada, ahora hay que ir por todo", agregó Maxi Amarfil y luego Pipe Ramis, uno de los héroes del ascenso, quien viajó con el plantel pese a estar lesionado: "Se repite más o menos lo que pasó hace unos años que era el el ascenso tan esperado y bueno, ahora esperemos poder lograr lo que todos queremos y darle una alegría a la gente".
Antes de subir al micro que los trasladó al aeropuerto los jugadores pudieron recibir laureles de parte de Patricia y Silvana y repetir la cábala del ascenso del 2023. Los laureles significan gloria y eso es justamente lo que la Lepra buscará en cancha de Instituto.
"Los laureles son victoria, gloria, y vamos por todo eso. Se lo ponen en los botines", revelaron las dos hinchas azules mientras despedían a los jugadores y al cuerpo técnico encabezado por Alfredo Berti.