El periodista Matías Pascualetti de Radio Nihuil contó este miércoles los detalles de un encuentro que tuvo con el papá de Julián Guzzo (13), uno de los dos chicos que sobrevivió al accidente en el parque San Martín, que terminó con la vida de Fausto Morcos (13).
Tragedia en el parque San Martín: "La mujer que atropelló a mi hijo Julián jamás me llamó"
El padre de uno de los 2 adolescentes sobrevivientes relató su dolor e indignación por la frialdad de la conductora de 82 años que pasó el semáforo en rojo
Si bien no está listo para hablar en público del tema, sí sentía que le podía hacer bien charlar y que se dé a conocer la situación que está atravesando junto a su familia y su hijo.
"Dice que la mujer ni siquiera lo llamó para preguntarle cómo está su hijo e imagina que tampoco lo va a hacer", relató Pascualetti y contó que el padre está muy angustiado por esta situación.
Esta actitud se condice con la postura judicial de la conductora. Fuentes de la causa revelaron que la mujer, en su declaración, aseguró que no pasó el semáforo en rojo en Boulogne Sur Mer y Clark y que no mostró ningún tipo de congoja por la tragedia que desató. Sin embargo, hay por lo menos 3 testigos que sí lo confirman: uno de ellos es el propio amigo de los adolescentes que estaba con ellos.
La escena de la tragedia, el sábado al mediodía frente al Parque General San Martín.
"Está muy enojado y dolido con esa situación, porque no cree que sea una asesina, pero la creía más humana y que podía empatizar con lo que generó", completó el periodista sobre el sentir del papá.
En otra parte del móvil periodístico, Pascualetti contó que el tercer chico que acompañaba a Fausto y Julián y que vio todo, "acompaña a Julián en su recuperación desde lo psicológico, charlando con él".
Fausto y Julián fueron atropellados por María Amelia Albina Molina, de 82 años, luego de pasar un semáforo en rojo en el parque San Martín. Conducía un Volskwagen Up blanco.
Fausto murió en el lugar y Julián atravesó un complejo proceso de recuperación, primero en la terapia intensiva del hospital Notti y luego en sala común. Un tercer amigo cruzó primero la calle y no fue alcanzado por el auto.
Este sábado Julián recibió el alta y ya está en su casa.
La historia de amistad entre Julián, Fausto y el tercer chico
Julián cursa 1 año en el CUC, donde se hizo amigo de Fausto y del tercer chico -se reserva su identidad a pedido de las familias-. Este último adolescente es quien presenció el accidente porque es el primero en cruzar la calle, distinto a lo que se creía antes cuando se hablaba de que no había logrado cruzar.
Los tres habían organizado una pijamada en una casa de la Quinta Sección durante la noche del viernes 31 de octubre. Al otro día fueron a jugar a la pelota al parque San Martín, estuvieron un rato allí y cuando regresaban a la casa ocurrió la tragedia.
"Julián lo admiraba mucho a Fausto porque como es fanático del fútbol, y Fausto jugaba muy bien, él tenía una gran admiración por su amigo. El grupo era de a 3 pero ellos 2 tenían muchísima complicidad", contó Pascualetti.
Además, el padre describió a Julián como un chico muy "amiguero": "El segundo día que entró a la secundaria ya teníamos 11 chicos en mi casa. Primero le pidió a la madre para ir con los amigos a comer una hamburguesa y no lo dejaron. Al segundo día organizó una juntada en su casa, es querido, toca la guitarra eléctrica, fanático del fútbol, hincha de Gimnasia, había vivido el ascenso, no fue a Buenos Aires, pero los esperó en el aeropuerto y estuvieron ahí festejando con los jugadores".
Las horas más tensas tras el accidente en el parque San Martín
Mientras ocurría el accidente, los padres de Julián -él psiquiatra y ella psicóloga- estaban en un congreso de Salud Mental, cuando los llamaron avisando que a su hijo lo habían atropellado. "El recuerdo que tiene es ver en la camilla a su hijo, muchas voces y la palabra adrenalina, que era lo que tenían que inyectarle los médicos", contó.
A partir de ese momento, los médicos le avisaron que lo importante es que Julián respondiera bien al tratamiento en las próximas 12 horas. "Cuenta que miraba el reloj y no pasaba el tiempo. En su cabeza todo el tiempo era hablar y pedir que saliera, que saliera y que saliera. Hasta que después de unos minutos dice que llegó el médico, le hacen la tomografía y una ecografía, y ven que no había daño en la cabeza", recordó de la espera en el hospital Notti.
Pero igual, le advirtieron que su hijo tenía que superar las primeras 12 horas, que no surgiera ninguna hemorragia interna. Pasado ese tiempo, Julián hizo un pico de fiebre que descubrieron que había sido producida por una neumonía por broncoaspiración.
Así se ve el santuario a Fausto en el parque San Martín.
El agradecimiento del padre de Julián a los profesionales
El papá de Julián está muy agradecido -según contó Pascualetti- con los médicos del Servicio de Emergencia Coordinado (SEC) que atendieron a su hijo en el lugar porque lo intubaron de forma exacta en la calle, algo que no es habitual.
"Él no recuerda a todas las personas que intervinieron pero quiere agradecerle a todos: no solo a la gente del Notti, con quien dice que va a estar agradecido toda la vida, sino también a los de emergencia y también cree que había otra gente que ayudó", expresó el cronista de Nihuil.
Recordó que le dieron el dato de que había un médico por la zona, por un torneo deportivo, que colaboró en el operativo de traslado. "Si pueden hagan correr mi agradecimiento", le pidió a Pascualetti.
"Ojalá algún día me los pueda encontrar para darles un abrazo, pero les agradezco a todos, a los que participaron externos, a la gente del SEC y ni hablar a la gente del Notti que le salvó la vida a Julián", fueron las palabras de agradecimiento del papá del adolescente que permaneció una semana internado.
El santuario a Fausto, armado por familiares y amigos, a una semana de su fallecimiento en el parque San Martín.
Las primeras palabras de Julián al despertar del coma
Hoy lo que tiene Julián, contó Pascualetti, es una fractura en la tibia que le descubrieron cuando estaban trabajando en la neumonía, que para no someterlo a más cirugías, le realizaron un tratamiento para ver cómo responde, si se puede ir soldando y si no reevaluarán una posible operación.
Además, sufrió una fractura de cadera y otra en el omóplato.
El papá de Julián expresó que cuando despertó su hijo lo primero que dijo fue: "Papá te amo, mamá te amo". Comenzó a preguntar por Fausto y quería saber qué le había pasado.
"Recién a los dos o tres días, se enteró que Fausto también tuvo heridas graves. Iba preguntando de a ratos, hasta que de a poco le fueron contando", afirmó Matías Pascualetti en Radio Nihuil.
Luego, le dieron el alta y volvió a su casa en una camilla especial con una silla de ruedas porque los médicos esperan que se suelden los huesos de la tibia y de la cadera, por lo que no puede hacer ningún esfuerzo.
Además, comentó que los padres descubrieron que un día estaba con el celular buscando en Google videos del fatal accidente. "Trataron de contenerlo, de que no buscara nada, porque había estado buscando un video que el padre dice que existe pero que no lo ha querido ver y pidió por favor que si alguien se encuentra con el video que no lo difunda", cerró el periodista sobre el accidente en el parque San Martín.







