Análisis y opinión

La tramoya pseudo mapuche: tierras ricas en Mendoza y fuego y ocupaciones en el Sur

Hay un “detrás de escena” por las resoluciones del INAI que revocaron posesiones a grupos mapuches en Mendoza. Usurpación de tierras y terrorismo en el Sur

Fue noticia la semana pasada, pero el significado trasciende más que los títulos: el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas declaró nulas tres resoluciones aberrantes que les reconocía la ocupación de tierras muy valiosas en el sur de Mendoza a comunidades de origen mapuche que se autoperciben ancestrales, y los expedientes volvieron a fojas cero. Ninguna ocupación: afuera.

Esas comunidades ya habían perdido juicios con los dueños reales por usurpación de tierras, con fallos definitivos de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza aunque uno de los grupos recurrió en queja al máximo tribunal de la Nación. Algún día se resolverá.

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Mapuches y sindicalistas en Los Molles, en el sur de Mendoza.

Mapuches y sindicalistas en Los Molles, en el sur de Mendoza.

Todos estos grupos ya podrían ser desalojados. Porque se hicieron de tierras a las que no tendrían derecho, con la complicidad del estado kirchnerista. Y la Justicia ya les dio la razón a los dueños reales.

Mientras esto ocurría en Mendoza la semana pasada, en el sur del país grupos anarquistas autopercibidos revolucionarios de Sierra Maestra, se tomaron revancha de los desalojos de pseudo mapuches en el Parque Nacional Los Alerces, prendiendo focos de fuego que quemaron miles de hectáreas en El Bolsón (Río Negro), el Parque Nacional Lanín en Neuquén, y en Epuyén, El Hoyo, Corcovado, El Maitén, El Pedregoso y Atilio Viglione en Chubut. Hubo al menos una decena de focos de fuego activos en los últimos días.

Aunque hay sospechosos y detenidos (uno de ellos muy grave por las quemaduras), el daño está hecho. Un relevamiento en medios cordilleranos sumó fuego en Bariloche, y en el propio Parque Los Alerces. En esta temporada ya se quemaron más de 25.000 hectáreas de bosques nativos, devastados totalmente. Muchos de esos incendios fueron intencionales, lo que constituye lisa y llanamente actos de sedición.

El incendio en Epuyén que consumió 3.600 hectáreas en tres días, tenía firma: se lo adjudicó un grupo denominado "Facción Autónoma de Liberación Mapuche" que reconoció relaciones con la Resistencia Ancestral Mapuche, y dijo que atacaba a "empresarios y terratenientes". En la AFI creen que están vinculados a grupos chilenos.

El panorama se completó con el terrorista ex flogger del Abasto, Facundo Jones Huala, reivindicando los incendios en el Sur y promoviendo la lucha armada contra el huinca. Lo hizo en la presentación de su libro. De no creer. El gobierno nacional lo denunció por incitación a la violencia colectiva y asociación criminal. Ignacio Torres, gobernador de Chubut, prometió que habrá cárcel para los pirómanos de trasnoche que siguen los delirios de Jones Huala, liberado hace poco en Chile y afincado nuevamente en los pueblos cordilleranos de nuestra Patagonia. Anoche (sábado), el gobierno de Chubut informó que tenían tres detenidos más por el incendio en El Pedregoso; y pusieron a disposición 10 millones de pesos de recompensa para quien ofrezca datos por los pirómanos que atacaron en El Maitén.

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Facundo Jones Huala cuando era extraditado a Chile. Ahora está de regreso.

Facundo Jones Huala cuando era extraditado a Chile. Ahora está de regreso.

Ya hubo cinco detenidos por los incendios en Río Negro. A dos los tuvieron que liberar por falta de pruebas, uno tendrá un mes de prisión preventiva, y esta semana se resolverá la situación de dos mujeres.

Los incendios de Chubut y Río Negro tienen un antecedente, cuando ocurrieron los grandes estragos forestales en Lago Puelo, El Hoyo y Epuyén: después del fuego, aparecieron los “ocupantes” que reclamaban derechos tanto en Puelo, como en Los Alerces. “Cuando los fuimos a censar, varios tenían teléfonos de Buenos Aires. Empezaban con 011” dijo el gobernador Torres.

La tierra "mapuche" prometida en Mendoza

Las resoluciones del INAI conocidas en Mendoza la semana pasada anulando otras de 2023, revocaron el derecho de ocupación de tierras a tres grupos mapuches, cuyos casos conviene recordar. Sobre todo para entender cómo algunos avivados, con la complicidad de funcionarios de gobiernos y de la justicia kirchneristas, buscaron acceder a tierras de propietarios privados.

Los expedientes que ahora vuelven a fojas cero que deberán tramitarse con la participación del Gobierno de Mendoza, significaban el reconocimiento de más de 30.500 hectáreas para las comunidades Lof Suyai Levfv, Lof Limay Kurref, y Lof El Sosneado, en perjuicio de una minera, una empresa de deportes de invierno, y de la sucesión de una familia de San Rafael. Para cumplir aquellas resoluciones, el Gobierno de Mendoza debía dictar una ley de expropiación y luego ceder las tierras a estos ocupantes “ancestrales” que en realidad, en algún caso, llegaron entrados los años noventa. El pueblo mapuche no es originario ni ancestral de la Argentina. Vinieron del lado chileno.

El Sosneado y Quintín Verón

La resolución 11 de este año tomada en el INAI y firmada el 31 de enero, revocó la ocupación de la tierra dictada a favor de la lof “El Sosneado” en 2023. Este caso, aunque parezca increíble, deriva de un conflicto de alquileres.

La minera sureña SOMINAR compró en 1942 esas tierras que los habitantes mapuches reclaman. La operación fue con Química Williams, anterior propietario.

SOMINAR les alquiló durante años parte de las tierras a distintos crianceros dedicados a sus animales y al campo. Uno de aquellos arrendatarios fue Quintín Verón, que se instaló en Arroyo Blanco.

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Nilda Verón, en el centro, junto a su representante Gabriel Jofré, en la Legislatura, cuando presentaron el reclamo por las tierras.

Nilda Verón, en el centro, junto a su representante Gabriel Jofré, en la Legislatura, cuando presentaron el reclamo por las tierras.

La minera le alquiló a Verón por mucho tiempo a través de contratos que se renovaban cada tres años y que recién comenzaron a firmarse en 1990. Antes, desde los '80, eran "de palabra".

Quintín Verón murió en 2007, y el contrato pasó a su viuda e hijas. La que firmaba era Nilda Verón, que cumplió por un tiempo, hasta que en 2011 se negó a seguir pagando el canon de alquiler.

SOMINAR empezó una batalla legal que finalmente ganó. También hizo una demanda por usurpación. El caso se resolvió a favor de la empresa en fallo definitivo de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza. Pero Nilda Verón recurrió en queja a la Corte de la Nación.

¿Cómo hizo la señora Verón para dar el paso de hacerse “ancestral” y reclamar la tierra?

Los derechos que sí valen

Hay una ley nacional, la 26.160, que protege la tierra ocupada por comunidades indígenas. Sancionada en 2006, suspendió por tres años todo tipo de ejecuciones contra grupos de pueblos originarios que demostraran fehacientemente habitar tierras que estén en litigio, prácticamente desde siempre. Esa ley fue prorrogada en 2009, 2011, 2013, 2017 y 2021. Este año tocaría otra vez. La ley exige que los que reclaman tierras sean en verdad ancestrales, originarios, que estén relevados por el INAI y tengan personería jurídica. En Mendoza hay 23 comunidades intentando conseguir las tierras que ocupan, acogidas a esta ley. Algunas, ya lo consiguieron.

El asunto con la Lof El Sosneado fue así: Nilda Verón argumentó que su familia llevaba 150 años en el lugar, que las tierras eran de propiedad comunitaria y que el INAI la había censado como miembro de la lof y autoridad "Werken". Luego de varios años, la Justicia consideró que la minera había probado ser dueña de la tierra, que la familia de Nilda Verón había alquilado para pasturas por años y pagaban un canon, y que esas tierras en litigio no estaban incluidas en un censo de tierra mapuche del INAI. Además, la lof “ancestral” se había formado en 2011.

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Uno de los grupos que reclamó tierras en San Rafael.

Uno de los grupos que reclamó tierras en San Rafael.

Los descendientes de Quintín Verón podrían ser desalojados hoy mismo de Arroyo Blanco porque su recurso en queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación no tiene efectos suspensivos. Pero la minera SOMINAR no ha querido dar ese paso, de momento.

El caso de Elio López

En 1989, un ciudadano de San Rafael llamado Elio López fue a trabajar a unas cabañas llamadas “El Puesto”, a la vera del río Salado, en Los Molles, Malargüe. Tiempo después empezó a construir una propiedad, y los dueños de la tierra se encontraron con la sorpresa y empezaron una demanda. A su vez, López y algunos de sus familiares les hicieron un juicio laboral, por su trabajo en “El Puesto”.

En 2012, el arquitecto sanrafaelino Jorge Lucchesi, Nelia Lambardi de Lucchesi, Clara Delfina Bombal y María Rosa Aldao, iniciaron la demanda de desalojo contra Elio López, quien también se amparó en el INAI “kirchnerista” y la ley 26.160 para quedarse con la tierra, y constituyó la lof Suyai Levfv. El INAI le reconoció en 2023 la ocupación de 3.854 hectáreas en una zona donde además hay una veintena de pozos de petróleo activos, donde operan varias empresas entre ellas YPF. Fue un escándalo.

La disputa legal duró años. Al final del camino, la Justicia concluyó que López y su familia no eran ocupantes ancestrales. Y deberán desalojar la tierra porque el fallo de la Corte es definitivo.

El caso Las Leñas

El tercer expediente que el gobierno nacional revocó con la firma del titular del INAI Claudio Avruj (fue secretario de Cultura de Mauricio Macri), es el que le otorgó 4.400 hectáreas a la lof Limay Kurref, en dos terrenos frente al ingreso a Las Leñas, y cerca de la Laguna de la Niña Encantada. Lugares de explotación turística y donde también hay actividad petrolera.

La resolución que habilitaba esta posesión fue la tercera de la saga en el verano de 2023, e hizo explotar en aquel momento al gobernador Rodolfo Suarez y al entonces senador y actual gobernador Alfredo Cornejo. Luego, la provincia presentó el recurso que habilitó la revocatoria -la semana pasada- de estas tres resoluciones por distintos vicios formales, entre ellos, el no haber convocado nunca a la provincia para que sea parte del expediente. La propietaria de esta tierra es la firma Nieves de Mendoza SA, empresa vinculada a la explotación turística en Las Leñas.

Las comunidades en orden

Para que se entienda: no está mal que los pueblos originarios reclamen tierras ocupadas de forma ancestral. La Constitución Nacional reformada en 1994 y la ley 26.160 protegen esos derechos. Pero antes, deben cumplirse una cantidad importante de requisitos, lo que en estos tres casos no ocurría. Fueron problemas laborales, de rentas, y de relaciones que terminaron mal, las que derivaron en estos casos de litigios por tierras.

En Mendoza hay 23 comunidades que están tramitando la personería jurídica y pidiendo el relevamiento del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, ambos recorridos necesarios para ampararse en la ley 26.160. Catorce de estos grupos son huarpes radicados en Lavalle (trece) y uno en La Dormida. Otros siete grupos son mapuches de Malargüe y San Rafael, otra comunidad se declara mapuche-pehuenche y es de Las Heras, y finalmente hay una comunidad colla asentada en Junín. Todos están en algún punto del trámite. Sólo siete, todas las mapuches, ya fueron relevadas por el INAI.

Fuego y ocupaciones

Cuando el fuego de El Bolsón arreciaba, semanas atrás, muchos pobladores se metieron a la montaña a combatir los incendios. Pero otros se ocuparon de conseguir palos y alambres para cercar sus tierras quemadas, por temor a lo que ya había pasado entre 2020 y 2021 e incluso antes de la pandemia en Chubut: después de los incendios aparecían “damnificados” autopercibidos mapuches, que tenían domicilios en la provincia de Buenos Aires, pidiendo la tierra y accediendo a subsidios que otorgaba el gobierno kirchnerista. El entonces ministro de seguridad de Chubut Federico Massoni denunció que a los "mapuches porteños" los traían en “colectivos de La Cámpora”. Historia antigua, a esta altura. Pero el miedo de los pobladores a que les quiten incluso sus tierras quemadas, existe. Que lo digan quienes conocieron a Ángel Reyes (84). Murió quemado en su puesto en El Bolsón. Lo encontraron en la madrugada del domingo 2 de este mes. No quiso autoevacuarse ni cuando el fuego le mordía las paredes de su casa.

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Brigadistas en el incendio forestal en Epuyén.

Brigadistas en el incendio forestal en Epuyén.

Los enfrentamientos en la cordillera patagónica suelen ocurrir en este tipo de conflictos. Un grupo de peones de campo y gauchos de a caballo la emprendió a rebencazos la semana pasada, contra familiares y amigos de dos detenidos por los incendios, que debieron ser liberados por la justicia rionegrina. Gauchos contra mapuches, grupos de izquierda y ultra antimineros ya son un clásico.

La tramoya

La ocupación de tierras privadas por grupos que se autoperciben originarios, para beneficiarse, es uno de los conflictos sociales que mayor grieta e indignación genera. En Mendoza incluso hubo una marcha organizada en 2023 contra las resoluciones del INAI que les reconocían derechos a estos grupos. ¿Por qué? Porque una inmensa mayoría de la población no tiene ni tierra ni vivienda, y alquila. Y otros tantos llegaron a la casa propia luego de endeudarse y de hacer enormes esfuerzos familiares, que no admiten comparación con la tramoya de grupos de avivados que con el apoyo de los funcionarios de entonces, pretendieron quedarse con tierras que no les pertenecían.

Una verdadera chantada.