_almidón de maíz
La maicena puede ser una alternativa natural al lavarte las manos en días fríos, incluso después del lavado tradicional
Para qué sirve lavarse las manos con almidón de maíz
El poder del almidón de maíz está comprobado, pues, según una publicación del Centro de Información de Biotecnología de Estados Unidos (NCBI), tiene propiedades absorbentes que ayudan a remover impurezas y a calmar la piel sin alterar la barrera cutánea. Por eso, es un poderoso aliado cuando se trata de ser un agente calmante y hacer una limpieza antimicrobiana.
Cuando se usa para lavarse las manos, ayuda a suavizar la piel, reducir irritaciones y controlar el exceso de sudoración. Su textura fina actúa como un exfoliante natural, eliminando células muertas y dejando una sensación de frescura.
Además, al no contener químicos agresivos, es ideal para personas con piel sensible o con tendencia a reacciones alérgicas frente a jabones convencionales.
Por estas razones, lavarse las manos con almidón de maíz puede ofrecerte varios beneficios, entre ellos:
_lavarse las manos
Ahora que ya sabes este remedio casero, cuando tengas problemas en la piel usa almidón de maíz
- Suaviza la piel seca y evita la descamación.
- Reduce la sudoración excesiva, actuando como absorbente natural.
- Calma irritaciones leves y rojeces en la piel.
- Funciona como exfoliante suave, eliminando impurezas y células muertas.
- Protege la piel sensible, evitando el uso de productos químicos fuertes.
La solución está en tu cocina: cómo lavarse las manos con almidón
Para poner a prueba este remedio casero, deberás mezclar una cucharada de maicena con un poco de agua tibia hasta formar una pasta suave sin grumos.
La mezcla puede aplicarse directamente en las manos como si fuera un jabón, frotando suavemente y luego enjuagando con agua limpia. Por supuesto que la sensación es diferente al jabón tradicional, pero es efectiva cuando se trata de eliminar residuos sin dañar la piel.
Además, al actuar como agente calmante, este ingrediente de cocina no deja la piel tirante ni con sensación de sequedad. Incluso, puedes utilizarla como complemento después del lavado convencional, para evitar la pérdida de humedad. Es una solución económica, natural y muy práctica.
El almidón de maíz se ha convertido en un aliado práctico y económico para el cuidado diario. Además de su uso en la cocina, puede ser un recurso natural para mantener las manos suaves, frescas y protegidas, sin necesidad de productos costosos o químicos agresivos.