Si estás pensando cultivarlas para adornar maceteros, rocallas o macetas del jardín, no tendrás que preocuparte mucho por sus necesidades. A continuación, compartimos una guía básica para sembrar una flor de primavera.
Cómo cuidar esta planta
Según los expertos de Verdecora, puedes cultivar el Cosmos bipinnatus tanto a partir de semillas como de plántulas del vivero, aunque sembrar directamente en el suelo en primavera es la forma más sencilla y común, ya que las semillas germinan bien.
Antes de entrar en detalles sobre los cuidados de la flor de primavera, hay que tener en cuenta que es una planta vivaz. Esto quiere decir que con la llegada del frío, sus partes aéreas desaparecen por completo. Puedes llevarte el susto de pensar que la planta ha muerto, pero lo más probable es que esté en estado latente, esperando que vuelva el calor.
La mayor exigencia del girasol rosáceo es que requiere una ubicación con mucha luz, pero sobre todo, mucho sol. No se adapta bien a la semisombra, hasta incluso puede morir. Así que, si deseas cultivarla en el interior de casa, es importante que la coloques en un espacio con luz natural abundante, cerca de la ventana.
No es minuciosa con el suelo, por lo que puede crecer en sustrato neutro, universal o suelos secos. Lo que sí, no soporta el encharcamiento, así que si la cultivas en maceta, tienes que asegurar que tenga un buen drenaje. En lo que respecta al riego, es importante hidratar la planta con moderación, aunque en meses de calor, es recomendable regar cada dos días.
Teniendo en cuenta los cuidados mencionados, puedes cultivar esta hermosa planta para llenar tu jardín de flores coloridas, parecidas a las margaritas, pero con un aroma intenso y dulce.