Pocha y Guillermina, las elefantas que quedaban en el ex Zoológico -que se reconvertirá a futuro, en un Ecoparque- emprendieron su viaje a Brasil, al Santuario donde vivirán.
Pocha y Guillermina, las elefantas que quedaban en el ex Zoológico -que se reconvertirá a futuro, en un Ecoparque- emprendieron su viaje a Brasil, al Santuario donde vivirán.
Viajaron enfrentadas, quizás como una forma de mantenerlas unidas y comunicadas a través de los barrotes del camión que las trasladaba. Una de las policías que custodiaban la salida del ex Zoológico, contaba que nunca había visto a dos animales comunicarse así. "Juro que parecía estar hablándose", relató.
El secretario de Ambiente, Humberto Mingorance, contó que el primer preparativo de traslado de las elefantas Pocha y Guillermina se montó el año pasado, pero fracasó por problemas de adaptación.
Este año, en cambio, Pocha y Guillermina entraron rápidamente en los dos contenedores y según aseguró el funcionario, las elefantas están muy calmas y los equipos, tanto del ex Zoológico de Mendoza, como del santuario de Mato Grosso, han trabajado en conjunto para que el traslado fuera exitoso.
Mingorance destacó que el paso a Brasil será por Foz Iguazú, y en este lugar va a haber un equipo del propio santuario esperando para reforzar al que viaja con las elefantas.
En cuanto a los trámites para realizar el traslado, se comenzó en noviembre del 2021 y se complicó por algunos requerimientos del gobierno Nacional. Sin embargo, el secretario sostuvo que en los últimos 15 días el procedimiento se destrabó.
Una trafic y dos camiones, uno con todos los elementos de logística -alimentos, medicamentos y otros enseres necesarios para que el viaje sea un éxito- y otro con los recintos de las dos elefantas, partieron cuando bajó el sol y las luces de la ciudad comenzaron a encenderse.
Un gran grupo de gente, con celulares para retratar el emotivo momento, las esperaban para despedirlas. La misma directora del Ecoparque, Mariana Caram, les dio una palmadita final y les agradeció por todo su esfuerzo para adaptarse al viaje.
Las elefantas y la comitiva que las acompaña tardarán al menos cinco días en llegar a Brasil, donde habrá que hacer otra adaptación para que se integren al lugar.
Enfrentadas, y dándose "besos" con la trompa, así partieron madre e hija, hacia un lugar en el que vivirán en libertad.
En lo que será el Ecoparque, quedan aún dos elefantes; Tammy, el macho y padre de Guillermina, un ejemplar también asiático, y Kenya, una elefanta africana. Ellos están incluidos en el plan de traslado de los 6 elefantes que quedan en Argentina.
Sin embargo, serán los últimos en partir y también irán al Santuario de Mato Grosso, en Brasil, pero para esto suceda aún no hay fecha de traslado.