Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
El músico y cantor, investigador y difusor del folclore cuyano, nació hace 63 años en Junín y allí habita desde entonces.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
La remera, el mate y la guitarra apoyada contra la pared de un rincón de su casa al que bautizó La Pancha Alfaro y que se muestra como un libro abierto; ese ambiente podría resumir la vida misma de Mercado. Allí se condensa su raíz, su identidad y su pasión por la canción popular.
"Es un desafío enorme -admite- porque no es el género más conocido de nuestro folclore. La chacarera, el chamamé o el tango tienen una presencia más fuerte en el exterior. Pero siento que la tonada merece su espacio afuera, que tiene un corazón que late y que, cuando suena, conmueve a cualquiera, aunque nunca la haya escuchado antes", considera sobre esa música que él convierte en un pasaporte sin fronteras.
Cantar tonadas en cavernas y minas abandonadas de España
Hablar con Roberto Mercado es dejarse llevar por un río de memorias folclóricas que recorren la geografía del país. Con la misma naturalidad con la que ceba otro mate, empieza a desandar la historia de sus viajes, de sus búsquedas y de su fidelidad a un género que lo atraviesa: la tonada cuyana.
“Podría cantar zambas o chacareras, y de hecho lo hago, pero hay algo en la tonada que me toca una fibra muy profunda. Es nuestra identidad, es la forma del folclore en la que dialogamos con el mundo”, confiesa quien de joven no pensó en dedicarse a la música, de hecho hasta pasó un año por la Facultad de Ciencias Económicas.
De ahí que revele: "A mí esto me fue llevando la vida, porque siempre fui inquieto, curioso. Mi abuelo Ramón decía: '¿Dónde está Roberto? Hurgueteando'". Esa característica suya lo ha llevado a escribir libros hasta del origen del nombre del distrito donde creció, Philipps, en su Junín natal; u otro ejemplar que publicó cuando se metió a investigar la historia de “Zamba de mi esperanza”.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
En sus 40 años de carrera, Mercado ha pisado grandes escenarios del folclore como Cosquín.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
Con ese convencimiento prepara las valijas para partir una vez más a España, y ser el único mendocino en la semana dedicada a la Argentina en la 18° edición del Otoño Cultural Iberoamericano (OCIb) que se realiza en Huelva y en la que otros años él ya ha formado parte.
Pero ahora ofrecerá cuatro conciertos exclusivos de tonadas. "En Europa hay mucha curiosidad por las músicas regionales, y me emociona que la tonada pueda tener ese espacio", dice el folclorista. Sus actuaciones en España se darán entre el 12 y el 19 de octubre en escenarios poco convencionales como cavernas y minas abandonadas.
En España, entre tonadas y cogollos
Cuando realiza tours por Europa al músico y cantautor mendocino le interesa "contar lo del cogollo en la tonada y hacer la ceremonia de que ellos vengan y te paguen el cogollo en la actuación con una copa de vino". Y se emociona al recordar esos momentos compartidos con personas de todo el mundo, tan lejanas a la cultura cuyana que se acercan al ritual con respeto y admiración.
En el 2019 debutó en el Otoño Cultural Iberoamericano de España, acompañado por Oscar Domínguez con quien presentó un disco en homenaje a Félix Dardo Palorma, “Palorma 100%”. En el 2021 volvió junto a Miguel García Urbani, fusionando el libro “Alto del olvido” de Miguel y las canciones de su disco “Menduzco”.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
Es la tercera vez que Roberto Mercado es convocado para formar parte del Otoño Cultural Iberoamericano de España.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
"Miguel recitaba un poema o relataba un cuento y yo cantaba, hicimos más de 20 conciertos por todo España y ahí explicaba al público que cuando uno dedica la canción dentro de la tonada, eso se llama cogollo, y el que lo recibe lo tiene que pagar con su copa de vino", recuerda el divulgador del folclore cuyano que de grande, a los 43 años decidió estudiar la Licenciatura en Música Popular.
"No sabés la emoción de la gente al acercarnos una copa de vino, eso es lo que llamo pintar la aldea", destaca. Y en tren de confesiones se define como "un trabajador cultural" más que un músico. "Si me preguntan qué preferís: ¿subir a tal escenario o dar una charla sobre música popular de tu lugar? Ahí me hacen dudar muchísimo", se sincera.
Un material con 20 tonadas que le llevó 30 años
Lo que hará en España será ahora un adelanto del material que publicará el año que viene y que aún no tiene nombre. Este trabajo ronda en su cabeza nada menos que hace 30 años, y en una conexión poética con el famoso libro de Pablo Neruda, "20 poemas de amor y una canción desesperada".
"Cuando tomé noción del libro de Neruda, inmediatamente dije: '20 tonadas de amor habría que hacer'. Fue algo que me salió de adentro. Cada vez que sentía el nombre de Neruda me salía lo mismo. Hace un año y medio, yendo a dar clases, ahora me jubilé pero fui docente de música en una escuela artística, un día nombraron a Neruda y volví a decir lo mismo", rememora.
¿Pero cuál sería el motivo de hacer 20 tonadas? "Si hacés un disco de tonadas a la tercera ya sacaron la púa y dejaron de escuchar el disco", reconoce entre risas. Aunque al instante le "cayó la ficha". "La tonada tiene un elemento tan propio, tan característico, que no tiene ningún otro género folclórico del país; tiene tres formas rítmicas distintas: la tonada tradicional, la tonada de estilo y la tonada valseada", argumenta el maestro.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
En la Pancha Alfaro de su casa, el músico se abraza a la guitarra entre discos y libros que tratan sobre el folclore y la cuyanía.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
Y advierte: "Pero después, cuando hacés mezclas entre ellas, la podés llevar a siete, eso no lo tiene ningún género folclórico argentino". Y en cuanto a su poética sostiene que "es muy rica también por no tener danza, la danza te estructura las formas, entonces poéticamente es amplísima".
Ese material constará de un libro y dos discos con 20 tonadas, "todas tonadas nuevas, con textos míos y música de diferentes compositores", anticipa el cantor. Y cuenta que lo grabará en dos partes de 10 para subir a las plataformas digitales, "10 con el tratamiento tradicional de la guitarrística cuyana y otras 10 con arreglos más contemporáneos, más abiertos a la creatividad del arreglador".
La versatilidad de la tonada en el folclore argentino
El camino de Roberto Mercado ha sido el de un cantor viajero. Con siete países recorridos, desde joven pisó escenarios grandes y pequeños, festivales multitudinarios y encuentros íntimos en peñas de folclore.
En esos viajes también aprendió a valorar el rol del folclorista. “Somos un puente. Cantamos para quienes ya no están, para los que vendrán, para los que quizás nunca escucharon una tonada pero sienten que esa melodía les pertenece. La música popular no tiene dueño: es del pueblo, de la gente, y por eso nunca muere”, sentencia.
Para él, la tonada tiene tanta profundidad como la vid que hunde sus raíces en la tierra seca de Mendoza. "Como género dentro del folclore, la tonada tiene una versatilidad que no tiene ningún otro género folclórico de la Argentina, tanto rítmica como poéticamente", aporta el maestro.
Como género dentro del folclore, la tonada tiene una versatilidad que no tiene ningún otro género folclórico de la Argentina, tanto rítmica como poéticamente. Como género dentro del folclore, la tonada tiene una versatilidad que no tiene ningún otro género folclórico de la Argentina, tanto rítmica como poéticamente.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
Y por eso se anima a diseñar un concierto de una tonada tras otra, con cogollos en el medio, a pedido de los organizadores del festival en España. "Antes fui allá y mostré la tonada cuyana y conté cuál había sido su origen, cuál había sido la herencia española que también influyó en la gestación de la tonada como género, y ese trabajo previo motivó esta invitación para hacer cuatro conciertos exclusivos de tonada", explica el músico.
La música popular no tiene dueño: es del pueblo, de la gente, y por eso nunca muere. La música popular no tiene dueño: es del pueblo, de la gente, y por eso nunca muere.
España lo espera con conciertos en distintas ciudades y escenarios, y él ya imagina los momentos en que la guitarra sonará con la cadencia cuyana en tierras lejanas. “Voy con la idea de que tal vez muchos no conozcan la tonada pero también con la certeza de que cuando suene algo se va a mover en los corazones, porque la música tiene eso, atraviesa idiomas, culturas, distancias”.
La Pancha Alfaro y un legado a su querido Junín
La Pancha Alfaro es el espacio de su casa donde está la discoteca, la biblioteca y la caseteca -"porque tengo una colección de cassettes impresionantes", se excusa-. El nombre de su lugar en el mundo es en honor a una cueca cuyana de Armando Tejada Gómez y Oscar Matus que lo acompañó por décadas en muchos escenarios y encuentros culturales.
No es un museo ni está abierto al público, pero por supuesto que quien necesita material sobre la historia del folclore no tiene más que contactarse con Mercado, quien habitualmente recibe a colegas músicos, investigadores o estudiantes de música popular.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
Más de 5.000 discos debe tener la Pancha Alfaro, el espacio de música y libros sobre el folclore de Roberto Mercado.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
“Me dedico a la actividad cultural con la música, no sólo a la música, y eso me ha permitido tener un archivo que es el más importante de la provincia en lo que hace a libros especializados en folclore, en poesía, de la canción popular; la discoteca debe tener más de 5.000 volúmenes", aporta Roberto Mercado.
Y sus dos hijos, Eliana y Mariano, ya saben que todos los tesoros que contiene La Pancha Alfaro deben ser donados a la Biblioteca Popular Pedro J. Bustos de su amado Junín, adonde creció y vive Roberto.
Junín: su origen y su destino
El escenario es su único ámbito de trabajo, su tarea cultural es amplia y abundante. Abarca desde escribir sobre folclore cuyano en una revista o diario, hacer una investigación sobre los cantores populares de Junín, participar en un libro sobre el departamento de San Martín, hasta realizar por 14 años el encuentro Junín Cantamérica que en los '90 puso en valor a los artistas locales de diferentes ramas y recorrió todos los distritos del departamento.
Y hasta se dio el gusto de escribir “100 años de un pueblo” en el centenario de fundación de Philipps, su lugar de infancia.
Roberto Mercado, folclorista con su libro sobre el distrito de Philipps en Junín
Para los 100 años de fundación de su distrito natal, Roberto Mercado escribió un libro sobre la historia de Philipps.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
"Vivo en Junín. Nací en Philipps, a los 26 años me casé con Monsi y me vine a vivir a la ciudad de Junín, y acá estoy desde ese entonces. Tenemos dos hijos, Eliana y Mariano", cuenta el folclorista.
Quedarme en Junín fue para nutrirme primero, sacándole el jugo a las raíces para después poder pintar la aldea. Quedarme en Junín fue para nutrirme primero, sacándole el jugo a las raíces para después poder pintar la aldea.
Y enfatiza en el nombre correcto de su distrito natal: "Te deletreo Philipps, porque soy bastante jodido con eso, y hasta escribí un libro para dar cuenta del nombre de este distrito de Junín, su procedencia y para que lo escribieran bien, sobre todo los de Vialidad", repite con gracia.
La radio, una aliada para difundir el folclore
En octubre Roberto Merado celebrará dos años al aire de Radio Nihuil con su programa semanal “De la raíz a los pájaros”, y a su vez cumplirá las 100 emisiones ininterrumpidas que hace los sábados a la siesta, de 13.30 a 15.30.
Dice que estar al aire de Nihuil “te hace levantar la vara en todo sentido y eso además a uno lo hace crecer personalmente”. Lo dice él que ha tenido experiencias radiales esporádicas en FM de la zona Este y que es un apasionado de la radio, amor que heredó de su padre.
Este año se animó a hacer su programa desde el exterior cuando cubrió el Festival de Folclore de Cosquín o cuando estuvo de gira en Chile. Hasta hizo un envío especial desde el convento de San Lorenzo, en Santa Fe, para conmemorar en agosto el mes sanmartiniano.
Abrazar el folclore como un acto de resiliencia
Para el músico, la tonada -y el folclore en general- es también un acto de resistencia cultural. “Vivimos en un mundo que tiende a homogeneizar todo, las músicas regionales a veces quedan relegadas, opacadas por lo que impone el mercado. Pero creo que ahí está nuestra riqueza: en defender lo propio, en mostrar con orgullo nuestro ADN al mundo”.
Sobre el futuro, sueña con que las nuevas generaciones tomen la posta. “Me emociona ver chicos jóvenes que agarran la guitarra y cantan tonadas, significa que la semilla está viva. Yo puedo ir a España pero lo más importante es que acá, en nuestras casas, en nuestras plazas, en nuestras fiestas, la tonada siga sonando”.
Lo que más me emociona no es el aplauso, sino ver que alguien del otro lado se conmueve, que le brillan los ojos. Eso no tiene precio. Lo que más me emociona no es el aplauso, sino ver que alguien del otro lado se conmueve, que le brillan los ojos. Eso no tiene precio.
Roberto Mercado, folclorista, cantor y divulgador del folclore cuyano
Todo el material de su estudio será donado a la biblioteca popular de su querido Junín una vez que él ya no esté en este plano.
Foto: Nicolás Rios/Diario UNO
Con la yerba lavada por la extensión de la charla, en la mirada nítida de Roberto Mercado se adivina el destino de un artista que, lejos de buscar fama o reconocimientos efímeros, persigue algo más profundo: mantener viva la memoria de un pueblo a través de su canto.