A la hora de tener una mascota, uno de los problemas más frecuentes es el de la presencia de pulgas y garrapatas. Justamente este, puede verse totalmente potenciado si cuentas con una planta de uso común en tu jardín, que es capaz de atraerlas.
A la hora de tener una mascota, uno de los problemas más frecuentes es el de la presencia de pulgas y garrapatas. Justamente este, puede verse totalmente potenciado si cuentas con una planta de uso común en tu jardín, que es capaz de atraerlas.
La garrapata es un parásito que puede llegar a tu hogar producto de las características de este ejemplar, que crea un ambiente propicio para favorecer el desarrollo de este arácnido que puede afectar la salud de tu mascota.
Sin entrar en rodeos, hay que decir que el helecho es la planta que es capaz de atraer a la garrapata a tu jardín, poniendo en peligro la salud de tu mascota como la de las personas que te rodean.
Las investigaciones apuntan a que los helechos emiten ciertos compuestos volátiles, como terpenos y ácidos fenólicos, que podrían estar funcionando como "llamadas químicas" para las garrapatas.
La garrapata es un parásito que no tiene una buena visión y que, justamente, su llegada a tu jardín puede estar guiada por los olores y las temperaturas. En este caso, las del helecho son favorables.
Además de la química de esta planta, la presencia de la garrapata en los helechos se ve favorecida por la forma del ejemplar. Las frondas largas y sus múltiples pliegues son la estructura perfecta para que este arácnido se esconda, esperando la presencia de tu mascota para aterrizar en su pelaje.
Ya lo sabes, si quieres cuidar la salud de tu mascota, será mejor que no cuentes con la presencia de esta planta en tu jardín, ya que estimula la presencia de la garrapata.
El invierno es una de las estaciones en las que las mascotas quizás requieren menos cuidados, ya que se cree que el frío es un excelente aislante de pulgas y garrapatas. Sin embargo, esta última afirmación es un error muy común, ya que muchos expertos aseguran que se debe seguir con el tratamiento.
Según han comentado diferentes expertos, como los de la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA), interrumpir el tratamiento antiparasitario de tu mascota es un error que podría costarte caro.
Sucede que las pulgas y las garrapatas son capaces de sobrevivir en ambientes cerrados, templados y con cierta humedad, refugiándose en elementos del hogar y alojándose en parques húmedos y jardines.
La pipeta a tu mascota debe aplicarse cada 30 días durante todo el año, independientemente de la estación, tal y como indican los mencionados expertos.