Nadie puede tener una buena razón para acribillar a un cóndor andino. Nadie, al menos en su sano juicio. Pues hay personas que no lo están.
Nadie puede tener una buena razón para acribillar a un cóndor andino. Nadie, al menos en su sano juicio. Pues hay personas que no lo están.
El 14 de noviembre, la Fundación Cullunche, fue puesta sobre aviso del hallazgo de un cadáver de cóndor andino, en la zona de Potrerillos. Un imponente ejemplar de 14 kilos, que se desplomó por los efectos de un escopetazo.
La gente de Cullunche recibió el cuerpo del cóndor para realizarle la autopsia y esto fue lo que encontró.
Según los especialistas de la fundación, el ave tenía 11 perdigonazos, lo que le produjo una hemorragia interna, la ruptura de su hígado y otras lesiones.
Los profesionales de la Fundación Cullunche publicaron en su perfil de Instagram las fotos de la autopsia, y manifestaron que "no queremos imaginarnos el sufrimiento de este magnífico e imponente animal que pesaba 14 kilos”.
Según explicó Jennifer Ibarra, quien dirige la fundación Cullunche y es referente provincial en cuanto a protección de la fauna silvestre, no hay un indicio claro de lo que ocurrió con el cóndor andino hallado muerto en la zona de Potrerillos.
Sin embargo, realizó algunas hipótesis que, por supuesto, no están comprobadas.
Según lo que pudo inferir, el cóndor podría haber sido asesinado por un paseante o una persona que fortuitamente se encontrara en la zona tirando al estilo "cazador deportivo", es decir, por el simple hecho de matar.
también puede haber ocurrido que alguna persona que cuida ganado, o que posee animales pequeños, como cabras, por ejemplo, tenga a creencia que los cóndores matan para comer.
"El cóndor andino no mata para comer, sino que come animales muertos, tampoco roba ganado de ningún tipo, porque no tiene garras -sus patas son como las de una gallina o un pavo- y menos se lleva animales con el pico".
Cabe destacar que a la gente que reside en la zona, se le ha solicitado que esté atenta para detectar cualquier anomalía o situación extraña por el lugar.
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Además, calificaron como “inaceptable” que en un área protegida como el Cordón del Plata y zonas que poseen las mismas condiciones de preservación de la vida silvestre -Potrerillos y Las Vegas, entre otras- haya gente que se dedique a envenenar animales y a dispararles.
Además, la Fundación Cullunche agradeció a los mendocinos que hallaron el cóndor: Camila Zambruno y Víctor Lavalle.
“Ellos dieron aviso a la fundación, luego se advirtió del hallazgo a Guardaparques y personal del Departamento de Fauna, quienes rescataron el cuerpo del cóndor para realizarle la autopsia", contaron.
Quienes conforman la Fundación Cullunche se lamentaron por tener que realizar una autopsia a un cóndor acribillado, porque la semana anterior, habían sido hacedores y testigos de una situación totalmente opuesta.
Ellos realizaron la rehabilitación de Ángel, el cóndor que fue devuelto a la cordillera la semana pasada y cuyas imágenes en pleno vuelo recorrieron el país.
“Es triste e indignante para nosotros”, el hecho de tener que realizar una autopsia a un cóndor andino.
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