El aroma de la ropa es un indicativo de la higiene de una persona. Si te encuentras recién salido de la ducha pero tus prendas huelen a humedad, encierro o tabaco, no tiene sentido ya que proyectarás mal olor.
Un perfume delicioso, que evoque sentimientos y destelle esplendor convierte cualquier prenda en algo sofisticado sin importar su precio o diseño. Obviamente, oler bien no es sinónimo de poder, sino de placer, pues pocas cosas son tan agradables como sentir un aroma fresco y limpio en la ropa.
No hace falta echar cantidades exorbitantes de suavizante para que una camisa o vestido huela a rosas. A veces, la clave es preparar un perfume casero para ropa con los ingredientes adecuados.
Ingredientes
- 90 ml de agua destilada.
- 350 ml de alcohol de farmacia.
- Diez gotas de aceite esencial de jazmín.
- Una cucharada de bicarbonato de sodio.
- Un frasco con atomizador.
El paso a paso para preparar perfume casero
Mezcla el agua con el bicarbonato de sodio hasta que se disuelva en cualquier recipiente que tengas en casa. Agrega el alcohol y las gotas de aceite esencial de jazmín. Agita bien la mezcla y vierte en un atomizador o recipiente con spray.
Deja reposar en un lugar fresco y oscuro durante 24 horas antes de usar. Pulveriza sobre la ropa a una distancia de 20 cm para un aroma limpio y floral. De hecho, puedes perfumar tu ropa antes de guardarla en el armario. Así, cuando quieras usarla no tendrá olor a encierro o humedad, sino aroma a flores y jazmín.






