Primeros contactos

Pocha y Guillermina conocieron a las elefantas Bambi, Mara y Rana en el santuario de Brasil

Las elefantas que llevan dos semanas en su nuevo hogar, ya sociabilizan con las demás residentes del lugar. Si bien Pocha y Guillermina ya habían tenido contacto con Lady y maira, esta fue la primera vez que vieron e interactuaron con las otras tres

Las elefantas Pocha y Guillermina, madre e hija que salieron del Ecoparque de Mendoza para tener una nueva vida en los verdes predios del Santuario de Elefantes de Brasil, comenzaron a sociabilizar con las otras residentes de su misma especie que viven allí. Este viernes conocieron a Bambi, Mara y Rana, quienes llevan algunos años juntas. El primer contacto con las recién llegadas fue muy emotivo para los cuidadores y un paso muy necesario para integrarlas a su nuevo hogar.

En los últimos días, Pocha y Guillermina tuvieron ligeros encuentros con las demás elefantas. La primera en acercarse fue Lady, quien vive en el santuario desde 2019. La segunda fue Maia, con quien Pocha fue muy dócil, mientras que Guillermina se quedó a un lado observando la situación.

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Pocha fue quien más interactuó con Maia a través de la cerca, mientras que Guillermina observó desde un costado.

Pocha fue quien más interactuó con Maia a través de la cerca, mientras que Guillermina observó desde un costado.

Este viernes se concretó el encuentro con las otras tres residentes del Santuario de Elefantes de Brasil. Rana vive allí desde 2019, y calcularon que tiene unos 63 años, Mara, de 56 años, llegó en el 2020 desde el Ecoparque de Buenos Aires, y Bambi, con 58 años, también fue llevada en el 2020.

El encuentro fue más que positivo, ya que todas las elefantas mostraron curiosidad en conocerse y sobre todo, hubo tranquilidad, especialmente en Pocha y Guillermina, quienes no tuvieron contacto con otros animales durante décadas.

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Las nuevas amigas de Pocha y Guillermina

El santuario dio un extenso comunicado por sus redes sociales donde detallaron cómo fue el encuentro de las elefantas durante este viernes, y un video donde se mostraron momentos de mucha curiosidad y a la vez ternura entre ellas.

Indicaron que luego de los primeros contactos con Lady y Maia, había mucha curiosidad sobre cómo sería la reacción al encontrarse con las otras elefantas. Pocha y Guillermina todavía están en un recinto diferente al resto, hasta que se habitúen al lugar y verificar que la relación entre todas es buena.

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"No estamos seguros de qué grupo de chicas vio primero a los demás, pero Pocha y Guillermina regresaron rápidamente al establo después de ese primer vistazo. El granero, que fue el primer lugar que pisaron cuando llegaron al santuario y salieron de los contenedores en los que viajaron, parece ser un espacio seguro para ellas. Tiene sentido que quieran tocar base allí y quedarse unos minutos después de un momento de emoción", detallaron.

Pocos minutos después de esto, Pocha y Guillermina volvieron hacia la cerca que separaba los dos patios. "Hubo muchos estruendos, lo que hizo que Mara se alejara hacia unos arbustos por un rato. Ella parecía ser la menos emocionada por la interacción, pero después volvió a saludarlas más de una vez".

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Pocha y Guillermina están relajadas en su nuevo hogar a dos semanas de su llegada.

Pocha y Guillermina están relajadas en su nuevo hogar a dos semanas de su llegada.

Finalmente, Rana y Bambi se acercaron directamente a Pocha y Guillermina. "Parece que Bambi fue la primera de las chicas en caminar y tocar a las otras dos de una manera muy dulce y tierna. Pocha presentó el lado de su cuerpo a las demás, que es una forma pasiva de presentación. Parecía estar alentando a Guillermina a unirse a las interacciones. Hubo una buena combinación de todos los elementos de la interacción social. Se tocaron, olieron, con comportamientos sumisos, saludándose de lado y de frente. Ninguna fue demasiado invasiva", indicó el santuario.

Pero, tanto Mara, Bambi como Rana parecían no saber qué hacer con los sonidos que hacía Guillermina, mientras que Pocha estuvo más silenciosa durante las interacciones. "Después de que Guillermina hablara un poco, Bambi y Mara regresaron corriendo a los arbustos donde parecía que ellas conversaban, lo que provocó que Pocha y Guillermina regresaran al granero para su momento de alivio de la emoción. Las interacciones tuvieron muchos momentos de alta energía que, aunque positivos, todavía bordeaban ser un poco abrumadores. Después de décadas de confinamiento, alejarse de tanta actividad ayudaba a que no se sobreestimularan".

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Pocha se puso de costado ante las nuevas amigas. Indicaron que es una forma de presentación entre elefantes.

Pocha se puso de costado ante las nuevas amigas. Indicaron que es una forma de presentación entre elefantes.

Aseguraron que "fue fascinante ver cómo Pocha fue la primera en alentar las interacciones con las tres chicas. Luego, retrocedió un poco cuando Guillermina se relajó más con las chicas. Por primera vez, con estas nuevas experiencias, Guillermina parecía sentirse más cómoda estando cerca por períodos más largos, mientras que Pocha se alejó. O tal vez este fue un caso de "mamá sabe más", con Pocha viendo la oportunidad de alentar a su hija a entrar valientemente en sus propias relaciones, como un individuo único y separado".

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