Yoga: cuáles son las posturas que fortalecen piernas y quitan el dolor de rodilla
Si bien existen posturas de yoga para trabajar diversos grupos musculares, hay tres en particular que nos permiten mover las rodillas en distintas direcciones, fortaleciendo músculos que las protegen y promoviendo la elongación. De esta forma, las personas que experimentan dolores o rigidez, podrán ponerle fin al problema.
La primera de las posturas de yoga sugerida por especialistas consiste en subir la rodilla derecha a la altura de la cadera, a 90º, y abrirla apoyando el pie en el muslo. Desde ahí, inclinar el tronco hacia delante, flexionando la pierna de base y llevando las manos a postura de rezo.
Elevar de nuevo la rodilla ayudándote de las manos para flexionarla contra el pecho. A continuación, agarrar el tobillo y llevarlo detrás del glúteo, uniendo las rodillas y manteniendo el equilibrio, con la pierna de base firme y el tronco elongado.
La segunda postura de yoga para fortalecer las piernas y prevenir rigidez y dolores de rodilla consistirá en llevar los brazos arriba inhalando y después llevar las manos al suelo, exhalando. Luego, con la pierna atrás, bajar la rodilla y levantar los brazos hacia el techo, bajando la pelvis.
Después apoyar las manos en el suelo y llevar la cadera hacia atrás para estirar la pierna delantera con el pie en flexionado. Volver a flexionar otra vez con los brazos arriba y repetir el estiramiento con los brazos hacia atrás.
La tercera de las posturas de yoga consistirá en realizar inclinaciones laterales, torsiones y elevación de pelvis. Para ello deberás partir una posición con piernas abiertas a unos 90º y flexionar una llevando el pie cerca del pubis. Inhalar elevando un brazo y flexionando lateralmente el tronco hacia la pierna estirada con el pie en flex. Luego volver inhalando y realizar una torsión hacia el otro lado.
Cambiar de posición volviendo al centro, apoyando el pie en el suelo, con el pie en diagonal hacia el otro lado. Inclinar lateralmente de nuevo, esta vez, sujetando el brazo contrario en la pierna. Regresar y apoyar la mano derecha en el suelo para elevar pelvis y llevar el brazo contrario extendido hacia atrás.
Finalmente, cambiar a una tercera posición, llevando la pierna flexionada hacia atrás, con el pie por fuera del glúteo y realizando una inclinación lateral. Apoyar después las manos en el suelo por delante para elevar el glúteo del suelo y bajar.