Si estás planificando viajar a Brasil tienes que hacer un presupuesto para ver cuánto vas a gastar en comida. Si bien no todos los días será el mismo gasto, se puede hacer un promedio y establecer un límite diario. El número va a depender de cuántas comidas suelas comer, el tipo de alimentos que te gustan y los días que dure el viaje.
Recientemente, la usuaria de TikTok @comoquierasviaja, que cuenta con más de 111 mil seguidores y comparte consejos de viajes, subió un video presentando los precios de las comidas en las playas de Buzios, en el estado de Río de Janeiro, Brasil.
"Hay que tener en cuenta que hay dos opciones. Los vendedores ambulantes o los puestos de la playa que se encargan de la comida más sofisticada o los tragos, mientras que a los vendedores ambulantes les podemos comprar cosas más sencillas como queso, empanadas, choclo", afirma la @comoquierasviaja.
En el video se puede observar la carta de un bar con los precios de las comidas y los tragos de septiembre 2025. "Por ejemplo una cerveza está a R$15 (reales), una caipiriña R$40, un trago R$65 y una gaseosa R$12", comentó la influencer.
Una promoción que incluye una porción de papas fritas, con una porción a elección de pollo, calamar, pescado o camarones, más un litro de caipiriña o jugo natural, o un balde con tres latas de Imperial cuesta R$180.
Una de las opciones para calcular tu presupuesto de comidas durante un viaje es dividir en tres comidas. A continuación, te dejamos una idea para tener en cuenta:
Desayuno: si eliges un hotel que tenga el desayuno incluido, entonces es una preocupación menos. Pero, en caso de que no sea así, una buena forma de ahorrar es hacer las compras en el supermercado y desayunar recorriendo la ciudad o en la habitación.
Almuerzo: si quieres una opción buena, bonita y barata a la hora del almuerzo (que suele aparecer en pleno recorrido del día) lo ideal es comer algo en un restaurante o lugar de comida al paso. Estas alternativas suelen tener buenas opciones y promos al mediodía.
Cena: esta puede ser la comida más difícil de presupuestar y la más cara de las tres, ya que la mayoría de los restaurantes ofrecen sus cartas sin promos y puede costar encontrar algo a buen precio.