Los primeros 5 minutos de la película "Belén" de Dolores Fonzi te quitan el aliento, te dejan el cuerpo tensionado y además te preparan para enfrentarte con una realidad que afecta a miles de mujeres en todo el país.
Camila Plaate sobre "Belén": "Era importante expresar el dolor físico que se manifiesta cuando estás por tener un aborto"
La actriz tucumana Camila Plaate brilla en la película "Belén" de Dolores Fonzi y reflexiona sobre el éxito de esta historia basada en un caso real
La protagonista de "Belén" es Camila Plaate, una actriz tucumana que no solo irradia buena energía, sino que además se ha puesto al hombro la lucha y defensa de los derechos de las mujeres.
En diálogo con Diario Uno, la actriz Camila Plaate reflexionó sobre la actualidad de su carrera y cómo "Belén" ha cambiado no solo su vida, sino también la de muchas de argentinas.
Camila, ¿cómo te preparaste físicamente para encarnar los primeros 5 minutos de "Belén"?
Camila Plaate: Para esos primeros 5 minutos, fue trabajar mucho con Francisca Ure, que es mi coach actoral de la película. Comenzamos a trabajar antes de comenzar el rodaje. Con Dolores también hablamos mucho. La idea era focalizar de manera física dónde se concentraban los dolores, dónde iban a respiraciones. Esa escena es como la más técnica con la que tuve que trabajar. Además, debía organizar la parte emocional.
Era importante expresar el dolor físico que se manifiesta cuando estás por tener un aborto, sino también que quedara bien el plano secuencia que propone Dolores en todo ese comienzo (que recién corta cuando vamos al quirófano).
Yo nunca pasé por un aborto, pero es parecido a cuando parís. Yo soy mamá, y tuve a mi hijo por parto natural a los 23 años y recuerdo el dolor. Es muy fuerte. Había que representar este aborto de una forma muy fría y técnica.
Yo ya venía de 3 meses anteriores de estar preparándome, leyendo el libro de Ana Correa una y otra vez, estaba encerrada en mi casa para estar asociado al encierro, fue a los hospitales públicos para poder estar lo más cerca posible de Belén.
Hay una mirada muy hermosa que tiene 'Dolo' como actriz, entonces ella tiene una confianza sobre la actuación de los demás y hay un código en común que encontramos donde ella me entendía que a mi como actriz iba a entender la escena y capitalizar el sentimiento a favor de la obra. También probamos con Fran ciertos gemidos donde la voz se estrangula y de qué manera se podía representar el dolor físico.
Mencionaste que realizaste consultas con Dolores sobre su mirada como directora. Pero ¿cómo fue trabajar con ella como actriz haciendo las escenas?
Camila: Fue buenísimo, ella es muy compañera, es muy divertida. Estabamos tratando una tragedia, una realidad, un drama. Dolores tenía la capacidad de hacernos pasar de un rodaje muy tenso a un clima amoroso, sensible y hermoso. Ella como actriz fue muy generosa con todo el equipo. Esa manera de vincularse le da un extra a la escena y el trabajo se vuelve mucho más placentero.
Sos tucumana, ¿Recordas el caso de "Belén" y cómo fue tratado en su momento por los medios de comunicación?
Camila: No, lo teníamos presente porque fue porque fue uno de los primeros casos que sale en los medios de comunicación. El tema es que acá en Tucumán no se hablaba nada cuando pasó lo de Belén. El caso se conoció primero internacionalmente, luego a nivel nacional y después acá.
Lo que yo tengo más presente son las marchas, pero no por los medios. Era un grupo de mujeres que se reunían en Plaza Yrigoyen, eran muy poquitas y luego se volvió masivo. Recién ahí comenzaron a salir los medios, se empezó a hablar sobre Belén, su caso y toda la injusticia. Además la marca pasaba por calle 25 de mayo, por la Plaza Independencia, por calles y lugares muy significativos.
Son muchos los comentarios de mujeres que se leen en las redes sociales donde se aplaude y se celebra la película. Desde que se estrenó "Belén", ¿se te han acercado personas o te ha llegado algún mensaje donde te cuenten una experiencia personal relacionada con la película?
Camila: Sí, muchísimo, muchícimo. Porque también creo que Belén mantuvo su identidad en secreto todo este tiempo y así va a ser y hay respeto enorme y gigante hacia eso por supuesto. Pero pasó algo algo así como que en el imaginario social yo comencé a ser una cara que referencia a Belén.
Por otro lado es increíble ya que muchas tenemos la necesidad de hablar y de decir las cosas que nos pasaron todo este tiempo, ya no nos queremos callar. Escucho y veo todo, me llegan mensajes terribles con historias muy fuertes. También recibo mensajes de hombres rotos, y llega una repercusión donde yo he tenido que organizarme de otra manera. Ha sido un cambio de paradigma para mi en mi vida cotidiana.
Estoy muy feliz, muy orgullosa de que se esté gestando este movimiento. Me encanta que una película pueda servir para traer resistencia, para traer lucha. Es un orgullo y es felicidad. Eso lo celebro, más allá de que a veces me pueda resultar muy intenso.
¿En algún momento se imaginaron todo lo que está pasando, los premios en San Sebastián, la elección de "Belén" para representar a la Argentina en los premios Oscar?
Camila: Yo creo que esta película despierta un deseo extra de militancia, más allá de su contenido político. Queremos que esta película se vea, se escuche. Creo que la historia de Belén vino a mover el avispero, a hacer ruido. El equipo ha trabajado con mucha conciencia para contar la historia con respeto.
Yo no me imaginaba lo de San Sebastián, es un universo que recién ahora estoy conociendo. Las productoras saben que esta película puede trascender fronteras. Es una historia que sale de un lugar muy chiquito del país, hay muchos mitos del norte que están llegando a todos los rincones del mundo. Es hermoso que el cine y el arte incomode. El arte sirve, funciona, no hay que dejarlo caer.
Entonces, sí sí había cierta conciencia y hay cierta búsqueda hacia dónde apuntarla, hacia dónde ir con la película. Cada uno vive la película desde su rol, Dolores como directora, yo como actriz, pero hay una militancia en común que nos atraviesa a todas por igual. Todas queremos que a la película le vaya bien.
¿Conociste a la verdadera Belén, me podés contar como fue ese encuentro, en qué contexto?
Camila: A Belén la conocí despues del rodaje, no antes. Como dos meses después. Fuimos a la casa de mi hermana Ruth, que también actúa en la película. Preparamos mucha comida, exageradamente. Yo estaba muy nerviosa. No sabía qué música poner, era una exitación muy grande. Todo lo que estoy haciendo ahora tiene que ver con ella.
Llegó con su hermana. Es una mujer muy lúcida, súper atenta y conciente de lo que le pasó. Yo no quería hablar de la película y Belén y empezó a contarnos detalles únicos. Muy generosa, muy sencible, muy buena persona. Terminamos siendo 4 tucumanas hablando sobre cómo es vivir acá, con sus cosas buenas, con sus cosas malas. Es una provincia que está hecha a base de batallas. Es un lugar muy chico, hay mucha furia en la calle. Pudimos hablar de eso, de cómo es hablar en Tucumán siendo mujer.
Después volvimos a vernos en Buenos Aires, me hizo un regalo y una carta. Nos escribimos. Quedó como un lazo muy hermoso con ella y con su hermana Juli.
Ella estaba muy contenta con la película porque es como cerrar un ciclo. Para mi, ser parte de ese sentimiento simbólico es un orgullo. Obviamente que a ella le costó ver la película, fue todo un proceso.





