Conservas

Tomates confitados en conserva: la receta fácil y con 5 ingredientes para realzar tus platos todo el año

Los tomates confitados en conservas realzan tus recetas con un sabor intenso y natural. Es una preparación fácil, duradera y perfecta para tener siempre a mano

Los tomates confitados en conservas son una opción práctica y deliciosa para sumar a tus recetas caseras durante todo el año. Su cocción lenta en el horno realza el sabor natural del tomate y permite obtener una preparación jugosa, aromática y versátil, ideal para quienes buscan ingredientes listos para usar sin complicaciones.

Preparar tomates confitados en casa es sencillo y económico. Una vez listos, pueden incorporarse a salsas, guisos, picadas o como complemento de platos principales, siempre aportando un toque gourmet.

Para que las conservas duren en perfecto estado, es fundamental usar frascos esterilizados y seguir los pasos de seguridad necesarios, lo que garantiza que esta receta se mantenga fresca y sabrosa por meses.

frasco de tomates confitados en conserva (2).jpg

Recetas: cómo usar los tomates confitados en conserva

Los tomates en conserva se pueden usar como acompañamiento de carnes, en ensaladas o en picadas. Otra opción es usarlos en salsa, por lo que primero hay que hidratarlos en agua caliente para que su textura sea más cremosa y su sabor más suave.

Por su parte, el aceite sobrante de la conserva de tomate tendrá un exquisito sabor, así que no lo desperdicies. Puedes usarlo para aderezar ensaladas o para cocinar.

Cómo esterilizar frascos de vidrio para conservas

Utensilios:

  • Pinzas o tenazas
  • Frascos de vidrio templados reforzados de 500 mililitros
  • Toalla de fibra natural limpia
  • Olla profunda

Procedimiento:

  1. Primero, revisa que los frascos estén en condiciones. No pueden tener rupturas ni grietas y las tapas deben enroscarse bien. Tampoco deben tener óxido ni ralladuras.
  2. Lávate bien las manos, durante 20 segundos como mínimo. Luego, limpia los frascos y las tapas con un cepillo, agua tibia y jabón. Deben quedar impecables.
  3. A continuación, coloca una toalla doblada dentro de una olla, cubriendo las paredes.
  4. Introduce los frascos verticalmente, bocarriba, con las tapas alrededor. Vierte el agua dentro hasta cubrirlos por completo, mínimo 2,5 centímetros por encima de los envases. Deja que hiervan mínimo 10 minutos y máximo 45, a fuego alto, con la tapa de la olla puesta. Pasado ese tiempo, apaga el fuego y deja que se templen dentro de la olla.
  5. Luego, saca los frascos de la olla con la ayuda de una pinza y colócalos bocabajo sobre una toalla limpia, papel absorbente o sobre una fuente con rejilla y deja que se escurran bien.
  6. Precalienta el horno a 120 °C durante 5 minutos y luego acomoda los tarros en una bandeja. Mételos al horno y espera 3 minutos antes de apagar. Sácalos cuando vayas a envasar los alimentos.
  7. Rocía alcohol dentro de los frascos. Debe ser una solución de alcohol etílico de 96 grados (700 centímetros cúbicos) y agua filtrada o mineral (300 centímetros cúbicos). Espera 2 minutos para que el alcohol se evapore y llena los frascos con la conserva.
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Recetas: ingredientes para hacer tomates confitados en conserva

  • Aceite de oliva (puede ser de coco o canola)
  • Manteca
  • 1 diente de ajo
  • Hojas de albahaca
  • Tomates redondos o perita

Cómo preparar la receta de tomates confitados en conserva

  1. Primero, lava los tomates con agua, sécalos con papel de cocina y córtalos como quieras. Puede ser en rodajas, a la mitad o en cuartos. Saca el centro si es muy duro.
  2. A continuación, coloca los tomates sobre una fuente de horno previamente engrasada con aceite de oliva o de coco. Sobre ellos, aplica manteca con una brocha de cocina y cocínalos a 100 °C por 6 horas, dándolos vuelta de vez en cuando.
  3. Una vez que los tomates hayan perdido su humedad, estén duros y no pegajosos, retíralos del horno. Cuando estén fríos, colócalos dentro de un frasco de vidrio previamente esterilizado (al final te enseñamos cómo hacerlo).
  4. Agrega un diente de ajo picado, hojas de albahaca y un poco de pimienta. Cubre completamente con aceite y asegúrate de que no quede aire dentro del frasco.
  5. Luego de unas horas, vuelve a poner aceite para que los tomates queden completamente sumergidos. Cierra los frascos y espera al menos una semana antes de consumirlos, para que tengan mucho más sabor.

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