Ante la inminente apertura de dos nuevas paritarias salariales, la de la Administración Central que estaba prevista para este viernes, y la de Salud para el miércoles próximo, que promete ser bastante difícil, como sucedió con los docentes, el gobernador de Mendoza Alfredo Cornejo volvió a recurrir a una misma estrategia: llamar a una reunión con los intendentes, volver a afirmar que las cuentas de Mendoza y de los municipios están complicadas, y remarcar que el techo para el aumento de los trabajadores municipales es del 22% anual, en dos tramos.
Salvo el intendente de Santa Rosa, Sergio Salgado, que asumió sus cuentas pendientes con la Justicia, y Roberto Righi, de Lavalle, que no pudo asistir, el resto de los jefes comunales estuvieron para repetir la fórmula.
El ministro de Hacienda, Martín Kerchner, les informó sobre la situación financiera provincial, bastante más complicada de lo esperado, por la baja recaudación y porque todavía no pueden conseguir el préstamo de 300 millones de dólares que buscan en el mercado externo para pagar la deuda pública de cuyos vencimientos están más próximos.
El ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, sin salirse un milímetro del esquema, dijo que "las finanzas de las comunas también están muy mal, y las proyecciones no son buenas.
El aumento del 22% es el que puede ser cumplido por los departamentos, debemos ser responsables en estos tiempos y afrontar un incremento que les pueda ser entregado a los empleados municipales", detalló el ministro de Gobierno.
En la misma línea se expresaron los intendentes radicales Tadeo García Zalazar (Godoy Cruz) y Rodolfo Suarez (Capital), y los peronistas Jorge Omar Giménez (San Martín) y Martín Aveiro (Tunuyán).
"El descalabro económico que dejó el gobierno anterior no puede ser solucionado en unos meses. Somos prudentes en ese sentido, y tras el déficit de $14.000 millones y los problemas con las deudas provinciales, lo máximo que podemos ofrecer es 22% en dos veces", opinó Suarez.
El peronista Giménez resaltó la importancia de la reunión sostenida con Cornejo y, en concordancia con sus pares, afirmó que "no hay más margen en las cuentas municipales".
En tanto, García Zalazar, uno de los pocos intendentes que goza de un superávit económico en Godoy Cruz, en el tema de aumento salarial para el 2016 se alineó con el resto de sus pares y expresó que "los aumentos deben ser proporcionales a los ingresos y los mismos son bastante bajos por el momento".
