La mayoría de los mendocinos que hayan madrugado el 18 de septiembre pasado recordarán haber desayunado mientras se enteraban de un asesinato. En las primeras horas del día Héctor Osvaldo Quiroga era asesinado por ladrones que ingresaron a su kiosco en Maipú. Ahora, uno de ellos fue condenado.
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Cristian Reina Flores (32) era detenido a los pocos minutos. Estaba tirado tras un arbusto, malherido con varios disparos. A su alrededor estaba la caja fuerte que habían sustraído de la propiedad de la víctima fatal.
Desde entonces se sabía que su final iba a ser el que se concretó este jueves: prisión perpetua. El asesino recibió esa pena en un juicio abreviado donde reconoció su autoría en el hecho.
El acuerdo fue entre la defensa de Reina, el abogado de la víctima Guillermo Yornet y la fiscal de Homicidios Andrea Lazo. El juez Diego Flamant dictó la sentencia.
Desde el entorno familiar de la víctima fatal destacaron públicamente el trabajo de la investigadora y de su antecesor en la causa, Flavio D'amore.
Ahora restará resolver la situación del otro detenido en la causa: Héctor Laucha González (30). Un testigo en la causa declaró que lo escuchó hablar con Reina Flores minutos antes del hecho y decía "tengo ganas de ir a meter caño".
Asalto fatal
A las 3.30 del miércoles 18 de septiembre, entre dos y tres delincuentes ingresaron a una propiedad ubicada sobre calle Videla Castillo, en la localidad de Russell, donde hacía poco tiempo sus dueños montaron un kiosco.
Los malvivientes se metieron a la habitación matrimonial y le efectuaron un disparo de escopeta a Héctor Quiroga, quien dormía con su esposa. Luego lo arrastraron por un pasillo mientras le exigían dinero. Al verlo malherido, la esposa les entregó una caja fuerte que contenía $50.000 en efectivo.
Lejos de estar conformes, los asaltantes se treparon hacia la casa de al lado donde vive el hijo del matrimonio, aunque sólo se encontraba la nuera con su pequeño. Al ver esto, con sus últimas fuerzas, Quiroga tomó una pistola 9 milímetros que pertenecía a su hijo, se cruzó a la propiedad y se desarrolló el brutal tiroteo que terminó con su vida -se encontraron 32 vainas servidas en la escena-.
Reina Flores estaba cumpliendo una pena a 12 años de prisión que cumplía en 2021, pero en septiembre de 2017 había obtenido la libertad condicional.