El mayor número de fiscalizaciones y las conferencias de prensa con lenguaje confrontacional no harían más que tensar aún más la situación.
Los privados buscan trabajar
Aunque esta línea económica y política que sigue el gobierno solo afectan el desempeño empresarial, lo cierto es que muchos de los capitales del país no han hecho más que seguir desarrollando estrategias para adaptarse tanto a la crisis social como a la de salud.
Desde el desarrollo tecnológico enfocado en brindar soluciones de consumo durante la pandemia, hasta incrementar las inversiones en sectores específicos para favorecer la operatividad, son solo algunas de las estrategias implementadas por el sector.
Sin embargo, como respuesta a la inflación, lo que estaríamos viendo con mayor frecuencia son las campañas de descuento en el sector minorista, que buscan evitar un crecimiento generalizado en el precio de su mercancía.
Algunos ejemplos de esto pueden incluir la campaña de 4 meses de precios congelados creada por Carrefour, las campañas semanales de DIA, o los programas de financiamiento de Changomas y Walmart.
Si observamos las ofertas de hoy en Coto es posible encontrar descuentos de entre 20% y 30% en notebooks y televisores inteligentes, con pago en hasta 18 cuotas sin interés. También es posible encontrar 30% en vestimenta, 25% en artículos de baño y 20% en vajillas. Finalmente, los alimentos tendrían hasta 15% de descuento según la tarjeta utilizada para pagar.
El dólar, “salvavidas” para muchos
Similar a lo que ha venido ocurriendo en los últimos años, y comportándose como un peligroso espejo de lo visto en países con Venezuela, la moneda estadounidense estaría ganando cada vez más relevancia en los meses recientes, con muchas personas incluso buscando ofertas laborales en el exterior para generar divisas.
Si bien el dólar serviría como una manera práctica y efectiva de proteger el dinero, ya que nos permite saltarnos la inflación, lo cierto es que también puede llevar a prácticas dañinas para el país como la evasión de impuestos, menor equipo humano de calidad (ya que la mayoría prefiere posiciones laborales fuera del país), e incluso la caída en la relevancia del sistema financiero nacional.
La gran disparidad entre el valor del dólar de gobierno y el dólar blue, también peligrosamente similar a lo visto en Venezuela, sería otro incentivo para que los argentinos busquen alternativas “grises” al sistema financiero tradicional.
Desde finales del 2019 que la situación argentina se muestra más y más preocupante, algo que indica que si en los próximos meses no se toman medidas realmente efectivas para comenzar a solventarla, podríamos adentrarnos en una crisis aún más compleja.