El siguiente video muestra cómo trabajó Vialidad Nacional en la zona de Las Cuevas, muy cerca del límite, para que se habilitara la circulación desde el viernes pasado a las 13.
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La apertura del Paso Cristo Redentor y el fin de una larga espera
La apertura del Paso Cristo Redentor trajo alivio después de que un temporal obligara a cerrar el tránsito dejando a más de 1.000 camiones y, según se calculó, unos 1.500 vehículos particulares de ciudadanos chilenos que permanecían haciendo tiempo en Mendoza porque no podían retornar a sus hogares.
En ese contexto, la nueva coordinación del paso -a cargo de Daniel Galdeano- buscó concentrar a los varados de alta montaña en zonas específicas, y tanto Gendarmería como la Policía y el Ejército cooperaron para asistir a las familias con bebidas calientes y alimentos.
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El Ejército aportó una cocina de campaña para ofrecer alimentos calientes a los varados.
Hasta donde trascendió, el perfil de los particulares varados en la zona de Uspallata y sus adyacencias se vinculaba con gente que vino a hacer sus compras a Mendoza y pensaba regresar rápido. Al vedarse el paso y haber quedado sin plata -y en muchos casos, con las tarjetas de crédito al límite-, hubo decenas de familias que optaron por pasar varias noches dentro de los coches.
Ahora el Paso Cristo Redentor está abierto, aunque el Paso Pehuenche, en Malargüe, continúa cerrado por la presencia de nieve sobre la calzada, con una sensación térmica que alcanzará los 10 grados bajo cero.
En este segundo video puede verse cómo efectivos de Gendarmería con el apoyo de personal de Vialidad Nacional rescataron en las últimas horas a los miembros de una familia que se encontraban varados por la nieve en esa zona del sur mendocino, sobre Ruta Nacional 145.
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Nuevo panorama
Este sábado, algunos mendocinos que fueron a comprar a híper y supermercados locales notaron que había menos clientes de Chile, lo que alivianó un poco las filas para pagar en las cajas.
Habrá que ver si la tendencia de los viajes de compras se sostiene durante la temporada otoñal e invernal, considerando que a veces el clima cordillerano es impredecible.
De todas formas -y a pesar del frío- se estima que el viernes habían llegado a Mendoza más de 62.000 turistas, muchos de la Argentina, con una ocupación hotelera que supera el 90% en el área metropolitana, de acuerdo con estimaciones del Ministerio de Cultura y Turismo.
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