Víctor Rodríguez tiene 54 años y es lustrabotas desde los 11. Con ese oficio ha sostenido a su familia. Esta semana mereció un reconocimiento en la Legislatura, después de haberle lustrado los zapatos a la mayoría de los gobernadores de la democracia.
Video: Víctor, el lustrabotas de los gobernadores de Mendoza
Ejerce el oficio hace 35 años y la Legislatura lo premió. Lustró zapatos de gobernadores, senadores y diputados y celebridades. Seis hermanos se dedican a lo mismo
Él usa zapatillas. Caminar por la ciudad buscando el peso no se lleva bien con la elegancia. Aún así, viste un guardapolvo azul impecable con su nombre bordado por sobre el bolsillo superior.
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Dice que la proliferación del calzado deportivo, moda que ha quedado como una tendencia irremediable, ha hecho disminuir el trabajo suyo y de sus colegas, entre los que se cuentan sus cinco hermanos. "Yo vengo atrás del mayor", especifica.
Vive en San José, Guaymallén. Allí armó su familia. Tiene 4 hijos, "dos varones y dos nenas", dice, que tienen entre 14 y 30 años. "Los varones, más grandes, trabajan en Aysam (Aguas y Saneamiento Mendoza), una de mis chicas reparte un diario y la más chica, de 14, estudia", cuenta.
Es jujeño de nacimiento. "Allá ya lustraba zapatos", recuerda, hasta que "mis padres vinieron a trabajar en la cosecha a Mendoza".
Ya en tierra cuyana, cuenta, "trabajé con mi padre, en la uva, la papa, arrancando zanahorias... Después volví a lustrar". Su padre, Benancio, falleció en el ´91. Su madre, Ángela Serrano, anda por los 76 y aún disfruta de los 6 hijos y del racimo de nietos.
Recuerda haberle lustrado los zapatos a Arturo Lafalla en sus años de gobernador y también a Roberto Iglesias. Al actual primer mandatario Rodolfo Suarez ya le lustraba cuando era intendente de la Ciudad de Mendoza. Es que la pomada de Víctor es política. Todos los días está en la Legislatura, en Casa de Gobierno y en la Municipalidad de la Ciudad.
Además, comenta, "voy a los estudios de varios abogados a lustrarles".
Ya ha sido objeto de muchas notas y entrevistas. Incluso "una vez, hace muchos años, me hicieron una en la revista Gente".
Con respeto al homenaje en la Legislatura, proyecto del senador de San Martín Fernando Alín (socialista que integra Cambia Mendoza), dice que, desde hace años, "me venían diciendo que me iban a dar una distinción en la Legislatura, pero terminaban el mandato, se iban y no pasaba nada". Por eso no se sorprendió con la distinción entregada este miércoles último, aunque reconoce que "me produjo mucha alegría, mucha emoción".
Víctor, que ha sobrevivido a la pandemia de las zapatillas, también logró superar la del coronavirus y la escasez de trabajo por la cuarentena. "Iba a lustrar a domicilio, a los estudios, a las oficinas", cuenta.
El hombre tiene la actitud del sobreviviente, del que pelea por el mango todos los días. A él lo conocen casi todos los que caminan por la Peatonal Sarmiento, los políticos y los abogados. Saben quién es. Víctor les reconoce los tobillos y ellos saben exactamente cómo es su coronilla. El miércoles, en el homenaje, quizás muchos lo hayan mirado a la cara, de frente, por primera vez.