Jardinería

Toma el aire para conocer el truco para cultivar orquídeas en agua

Las orquídeas en agua pueden florecer al igual que estando en tierra, conoce el truco para cultivarlas y que no se pudran

Las orquídeas epífitas son las estrellas de este espectáculo acuático. Con sus raíces aéreas especializadas, estas orquídeas pueden absorber la humedad del aire y prosperar sin necesidad de suelo. Entre las más comunes están las Phalaenopsis o Cattleya, perfectas para llevar este truco a tu jardín o espacio interior. Sin embargo, es crucial saber que no todas las orquídeas pueden bailar en este escenario acuático; las variedades terrestres simplemente no podrían hacerlo.

Ahora que conoces el elenco adecuado, es hora de preparar el escenario. Luz filtrada y temperatura cálida son las luces que iluminan este espectáculo. Coloca tus orquídeas cerca de una ventana donde reciban luz suave y sombra equilibrada durante el día. Y no olvides mantener la temperatura ambiente por encima de los 23 °C para que estas estrellas puedan deslumbrar con sus flores.

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Orquídeas, truco para cultivo en agua.jpg

Truco para que las orquídeas crezcan en agua

El agua, el elemento central de este truco, también necesita ser preparada para el espectáculo. Lávalas bien, elimina cualquier rastro de cloro y cámbialas cada tres semanas para evitar que las algas arruinen la función. Y recuerda, el contenedor debe ser como un vestido a medida: estrecho en el cuello para sostener las raíces y amplio en la base para permitir su expansión.

Otro de las cosas que hay que tener en cuenta es la temperatura del agua que va a añadirse al colocar la planta debe estar del tiempo o temperatura ambiente, no helada ni caliente.

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Orquídeas en agua, truco de cultivo.jpg

Es importante mencionar que las orquídeas cultivadas en agua son propensas a la pudrición de la corona, que ocurre cuando hongos y bacterias proliferan en la base de las hojas debido al exceso de agua. Por esta razón, es fundamental revisar continuamente el estado de nuestra orquídea en agua. Debemos asegurarnos de que las hojas no estén mojadas, se mantengan firmes y verdes, y observar si hay nuevos tallos florales.

Finalmente, no podemos olvidarnos del elemento que alimenta el crecimiento y la floración: el fertilizante. El osmocote de liberación lenta es el mejor compañero de estas divas acuáticas, proporcionándoles los nutrientes que necesitan para brillar en el escenario.

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