El 24 de noviembre, el santoral se dedica a conmemorar a las santas Flora y Santa María de Córdoba, dos mártires que se encargaron de pregonar la palabra de Cristo y que fueron decapitadas por mantener su fe.
El 24 de noviembre, el santoral se dedica a conmemorar a las santas Flora y Santa María de Córdoba, dos mártires que se encargaron de pregonar la palabra de Cristo y que fueron decapitadas por mantener su fe.
Ambas santas son consideradas un ejemplo por la entrega total que tuvieron hacia Cristo, la Iglesia Católica y su propia fe. Ambas fueron decapitadas el 24 de noviembre del año 851 y su muerte es conocida bajo el nombre Mártires de Córdoba.
Santa Flora fue hija de una madre cristiana y de un padre musulmán. Si bien, ella fue educada bajo esta última religión, terminó por tomar su fe cristiana de la mano de la Iglesia Católica y se entregó en secreto a difundir sus ideas. En tanto, Santa María de Córdoba se crió en un monasterio y siempre tuvo que su destino iba a ser morir por Jesucristo.
Al conmemorar a Santa Flora y Santa María de Córdoba el 24 de noviembre, se recuerda sus ejemplos de servicio y fe, y se pide su intercesión para seguir su ejemplo de entrega, fuerza y valentía en nuestras vidas.
Para pedir la protección de estas dos santas se debe encender una vela y decir las siguientes oraciones:
"Gloriosa Santa Flora a ti acudimos, llenos de confianza en tu intercesión. Nos sentimos atraídos a ti, con una especial devoción y sabemos que nuestras súplicas serán más agradables a Dios nuestro Señor, si tú, que tan amada eres de Él, se las presentáis. Tu caridad, reflejo admirable de la de Dios, te inclina a socorrer toda miseria, a consolar toda pena y a complacer todo deseo y necesidad, si ello ha de ser en provecho de nuestra alma. Mira, pues, nuestras miserias y penas, nuestros trabajos y necesidades, nuestros buenos deseos, y alcánzanos que cada día aseguremos más nuestra eterna salvación con la práctica de las buenas obras y la imitación de tus virtudes. Amén".
En el caso de Santa María de Córdoba, para pedir su protección se debe rezar la siguiente oración:
"Bendita María, tu que sufriste un gran tormento por defender tu fe, intercede por nosotros para que podamos ser fuertes antes los enemigos y que nunca dudemos de nuestra fe". Amén.
El santoral de hoy, 24 de noviembre, festeja también las siguientes onomásticas: