La sabiduría japonesa plantea reflexiones acerca de la vida cotidiana que resultan esclarecedoras para nuestro día a día. Los nipones siempre tienen una respuesta para los problemas, dudas y pensamientos que rondan nuestra cabeza.
Sabiduría japonesa: 10 consejos para encontrar felicidad y sapiencia
La cultura nipona tiene su reflejo en lo que el mundo conoce como sabiduría japonesa, una serie de conceptos filosóficos tan atractivos como esclarecedores
En esta nota seleccionamos 10 consejos que fueron publicados por el diario Español El Mundo, y compilados por el periodista Fernando Sánchez Dragó.
Sabiduría japonesa: 14 consejos para ser feliz y sabio
1- Si un problema tiene solución, ¿para qué preocuparse? Y si no lo tiene, ¿para qué preocuparse? No hay que confundir preocupación con tristeza, en este caso lo que se plantea es la administración de energía en lo que vale o no la pena.
2- No retengas a quien se va ni rechaces a quien llega. Hay cosas que no se pueden controlar, todo pasa por algo y nadie es el dueño de nadie. Este consejo además habla de dejar de lado los prejuicios ante gente que recién conocemos.
3- Si lo piensas, decídete. Si ya te decidiste, no lo pienses. Cortito: no hay que darle tantas vueltas a los proyectos o decisiones. Mucho menos arrepentirse.
4- Es mejor ser el enemigo de una buena persona que el amigo de una mala. Las personas de las que te rodeas son las que harán tu vida mejor o peor. Ha que rodearse de personas que valgan la pena, aunque sea para discutir y tener contrapuntos.
5- Si no existiera la gente común, tampoco existirían las personas extraordinarias. No está tan mal ser "del montón", muchas personas quisieran estar ahí y no lo logran.
- Rápido significa lento, pero sin pausa. La constancia es una de las mayores virtudes que puede tener una persona
7- El que quiere subir inventa la escalera. El ayudante más fiel que tendrás en tu vida siempre serás vos mismo.
8- Hasta el viaje más largo comienza con un solo paso. El primer paso es el más difícil, pero también el más importante.
9- A los 10 años es una maravilla, a los 20 es un genio y a los treinta es una persona del montón. No hay que deslumbrarse ni sobredimensionar a las personas que suelen mostrar un brillo especial a temprana edad. La vida y los años todo lo nivelan.
10- Si preguntas sentirás vergüenza un minuto; si no lo haces, sentirás vergüenza toda la vida. Esto puede relacionarse con un conocido refrán: "No hay preguntas tontas, hay tontos que no preguntan".





