La energía vuelve a ocupar el centro de una disputa que no siempre se ve. En América del Sur, la fragilidad de las redes y la necesidad de inversión estructural son parte del paisaje cotidiano, las grandes potencias, como Rusia, encuentran un terreno fértil para avanzar.
Rusia pone en la mira a un país de América del Sur para construir una planta nuclear de alta tecnología que reduciría los cortes de luz
La energía no es solo electricidad, es poder, dependencia y futuro. Y América del Sur vuelve a estar en el centro de la escena
Rusia lo sabe y actúa en consecuencia, no solo ofrece tecnología, financiamiento o cooperación, sino también una relación de largo aliento que mezcla infraestructura, política e influencia. Te contamos en qué país de América del Sur está en la mira del Kremlin.
Rusia pone en la mira a un país de América del Sur para construir una planta nuclear de alta tecnología que reduciría los cortes de luz
Según el reporte Global Reach llamado: The Kremlin’s Playbook in Latin America del Center for the Study of Democracy (CSD), Argentina aparece como uno de los países donde Rusia mostró mayor interés estratégico. El foco estuvo puesto en la posibilidad de financiar y construir una planta nuclear de alta tecnología, pensada para reforzar el sistema eléctrico y reducir los cortes de energía que afectan a amplias regiones del país.
Esta historia comenzó en abril de 2015, durante la visita de Cristina Fernández de Kirchner a Moscú, cuando Vladímir Putin planteó avanzar con Rosatom en el diseño de un reactor de unos 1.200 megavatios. La propuesta a este país de América del Sur está asociada a un esquema tipo VVER-1200 que se presentó como una vía para diversificar la matriz energética argentina y fortalecer su soberanía eléctrica.
Por qué América del Sur es clave para Rusia
Más allá de que el proyecto no se concretó plenamente, dejó una señal clara, Rusia buscaba posicionarse como socio estructural en un sector sensible. Rosatom y Argentina siguen conversando sobre cooperación en el ciclo nuclear, especialmente en temas como el combustible, y esperan posibles acuerdos al cerrar el 2025.
Las claves del interés de Rusia en este país de América del Sur son
- Energía como palanca política: el CSD subraya que la tecnología nuclear no es solo inversión, sino dependencia técnica, combustible, repuestos, capacitación y financiamiento a largo plazo.
- Contexto de sanciones: frente al aislamiento internacional tras la guerra en Ucrania, América del Sur se volvió un espacio clave para sostener vínculos económicos y diplomáticos.
- Infraestructura crítica: centrales eléctricas, transporte y comunicación funcionan como puertas de entrada a decisiones estratégicas.
El “manual” del Kremlin no se limita a Argentina. Se expende a toda América del Sur. En Venezuela, Rusia sostiene alianzas energéticas en el sector petrolero pese a las sanciones. En Bolivia, Rosatom avanza con un centro de investigación nuclear en El Alto, orientado a medicina y tecnología. En Brasil, el interés pasa por los fertilizantes, mientras que Panamá aparece como un nodo financiero sensible.





