El sol y el paso del tiempo pueden dejar las macetas de plástico o barro opacas, decoloradas o manchadas. Muchas veces terminan en la basura, pero hoy el reciclaje propone reutilizarlas dentro del hogar para darles una segunda vida estética y funcional. Con pocos materiales y un sencillo paso a paso, podés transformarlas en un tesoro doméstico.
El mundo del DIY (hazlo tú mismo) ofrece soluciones creativas para recuperar estos elementos del jardín. Con materiales básicos y algunas horas de dedicación, puedes crear una pieza única que realce la decoración de cualquier ambiente, sea interior o exterior.
¿Por qué reciclar macetas quemadas por el sol?
Además de ser una opción económica, reutilizar macetas dañadas contribuye a reducir residuos domésticos, a aprovechar materiales en buen estado estructural, a crear piezas decorativas personalizadas e incorporar el estilo rústico o boho a interiores.
Aunque estén “quemadas” o descoloridas, si la maceta no está rota, sigue siendo útil. Solo hay que renovar su exterior, pues una vez decoradas, estas macetas recicladas pueden convertirse en:
- portamacetas para plantas de interior
- organizadores de útiles, pinceles o fibras
- contenedores para cocina (esponjas, bolsas, servilletas)
- porta-velas grandes o centros de mesa
- decoración para estanterías y recibidores
Reciclaje: cómo decorar las macetas con hilo o cuerda
Para este proyecto de reciclaje casero vas a necesitar las macetas viejas, decoloradas o quemadas por el sol, hilo grueso, hilo de yute, sisal o cuerda de algodón, pegamento de contacto o silicona caliente, tijera, pincel (opcional), barniz al agua o cola vinílica diluida (opcional para sellar).
Podés elegir el color del hilo según el estilo del ambiente: tonos neutros para estilos nórdicos, colores vibrantes para un look bohemio o combinaciones para espacios infantiles.
El proceso comienza con la preparación de la superficie. Lija toda la parte externa de la maceta hasta lograr una textura uniforme. Este paso resulta fundamental para que el cordón de yute se adhiera correctamente.
Luego, aplica el pegamento o silicona caliente y empieza a enrollar el cordón de yute alrededor de la maceta. Al alcanzar la mitad del proceso, incorpora el diseño pintando secciones del cordón en marrón. La cinta de papel ayuda a mantener las líneas del diseño prolijas y definidas.
Continúa cubriendo el resto de la maceta con el cordón natural, creando un contraste visual con las secciones pintadas. Para el toque final, recorta los excedentes del cordón y coloca la pieza sobre la base de madera.





