Por lo general, los carozos de cereza terminan en la basura. Sin embargo, estos pequeños desechos esconden propiedades útiles, usos prácticos y beneficios sorprendentes que los convierten en un auténtico tesoro doméstico. Desde jardinería hasta remedios caseros y manualidades ecológicas, los carozos pueden transformarse en recursos de utilidad.
Te contamos por qué deberías guardarlos y cómo aprovecharlos al máximo.
Por qué los carozos de las cerezas son un tesoro
Lo cierto es que poco se conoce de los beneficios de este tipo de carozos, por eso acá te los contamos:
Las cerezas son una fruta muy consumida en estas épocas.
Un tesoro de la jardinería para germinar nuevos cerezos: aunque requieren un proceso especial, los carozos de cereza pueden convertirse en plantas nuevas. Cada carozo contiene una semilla que, con el tratamiento correcto, puede germinar y dar vida a un cerezo joven, permitiendo cultivar un árbol frutal desde cero.
Un dato clave aquí es que las semillas necesitan pasar por estratificación fría, un período en la heladera de 8 a 12 semanas para poder brotar.
También funcionan como relleno térmico casero. Pues los carozos de cereza son resistentes al calor y conservan la temperatura durante mucho tiempo. Por eso, se usan como relleno natural para almohadillas térmicas, compresas de calor y bolsitas para aliviar contracturas. Se calientan en el microondas y mantienen el calor de forma uniforme.
Incluso, son ideales para drenaje en macetas. Si no tenés arcilla expandida o piedras pequeñas, funcionan como un excelente material de drenaje porque evitan que la tierra se compacte, mejoran la aireación de las raíces y ayudan a que el exceso de agua salga más fácilmente.
Ten en cuenta todos los beneficios de los carozos de las cerezas y utiliza la opción que más te guste.
Por último, son perfectos para proyectos artesanales. Los carozos limpios y secos se pueden usar para armar objetos decorativos o prácticos para bolsitas aromáticas (mezclados con lavanda o romero), rellenos de muñecos artesanales y adornos rústicos.
Y un detalle no menor, sobre los beneficios de los carozos de cereza es que pueden convertirse en abono, pero con un truco de jardinería es específico. Si bien son duros y tardan en descomponerse, los carozos de cereza se pueden incorporar al compost si se trituran previamente y aportarán carbono fundamental para equilibrar los residuos verdes.






