Lo cierto es que en esta época la fruta para a tener gran protagonismo en la mayoría de las casas, sobre todo cuando es la temporada de alguna. Y aunque hay muchas que se comen ahora, las cerezas suelen ser las favoritas. Pero lastimosamente, cuando no se cuidan correctamente, pueden estropearse en apenas dos o tres días.
¿Existe un método sencillo que permite conservarlas frescas hasta 15 días sin que aparezca moho ni se vaya su característico sabor? Sí. Todos los detalles sobre el truco.
Entre octubre y noviembre es la temporada de las cerezas, una de las frutas más elegidas para pasar el calor.
El truco para que las cerezas se conserven por 15 días
Las cerezas son unas frutas particularmente sensibles al calor. Aunque puedan parecer resistentes, una temperatura elevada acelera su maduración y deterioro.
El secreto está en cómo y dónde las guardas en la heladera. Antes que nada, no las laves hasta el momento de consumirlas, ya que la humedad acelera su deterioro. Solo elimina las que estén magulladas o con signos de moho para evitar que contaminen al resto.
Una vez seleccionadas, coloca las cerezas en un recipiente hermético o una bolsa con cierre tipo “zip”, preferiblemente de vidrio o plástico con tapa. Dentro, pon una hoja de papel absorbente o servilleta para retener la humedad que se genera dentro del envase.
Luego, guarda el recipiente en el cajón de las frutas de la heladera, que mantiene una temperatura estable y ligeramente más alta que el resto del refrigerador.
Seguí estos consejos para conservar correctamente las cerezas y poder disfrutarlas sin desperdiciar ni gastar dinero.
Además, otro truco importante es dejarlas en la parte de atrás de la heladera, que suele ser la más fría. También puedes acudir al vinagre, esto es una alternativa eficaz, sobre todo si quieres extender su vida útil unos días más. Haz un lavado rápido con vinagre antes de guardarlas.
Este baño ácido actúa como desinfectante natural, eliminando esporas y bacterias que podrían hacer que la fruta se eche a perder antes de tiempo. Después repetí el proceso de secado con papel absorbente antes de guardarlas. La humedad es el enemigo número uno de las cerezas.





