Sin embargo, más de un dueño se ha quejado del hecho de que los ejemplares crezcan desviados, siendo las siguientes algunas de las causas posibles:
- Falta de luz solar: los rosales necesitan al menos seis horas de sol directo al día para crecer rectos y fuertes. Si están en una zona sombreada, es probable que tiendan a curvarse buscando la luz.
- Riego inadecuado: la falta de humedad en el sustrato provoca que el tallo se debilite y doble. Por el contrario, el exceso de agua también puede causar problemas como hojas amarillentas y tallos blandos.
- Problemas nutricionales: una falta de potasio debilita los tallos, haciéndolos más susceptibles a doblarse. El exceso de nitrógeno puede producir un crecimiento blando y tierno, más propenso a los problemas.
- Competencia por nutrientes o luz: si varias plantas están muy juntas, competirán por los recursos, lo que puede hacer que los tallos se tuerzan al intentar crecer más rápido que sus vecinas.
- Daño físico: un tallo puede doblarse por haber sido golpeado o por el peso de una flor demasiado grande que no tiene el soporte adecuado.
rosas, luz solar
Las rosas del jardín necesitan luz solar para crecer adecuadamente.
Cómo solucionar este problema
Para que las rosas de tu jardín crezcan derechas, todo lo que tienes que hacer es primero identificar la causa principal del problema. Luego, deberás hacer lo contrario a lo que vienes haciendo. Por ejemplo, si hay una deficiencia de luz solar, deberás colocar tus rosales en un lugar donde reciban sol directo.
El riego, la fertilización y la poda, son hábitos fundamentales para dejar atrás la presencia de este problema. ¿Estás listo para ser un experto en jardinería?