En este contexto, la dermatóloga Sylvie Meaume, jefa del Departamento de Geriatría, Heridas y Cicatrización del hospital Rothschild de París, advierte que una ducha excesiva puede no solo dañar la piel, sino también eliminar una serie de bacterias que son beneficiosas.
Por este motivo, y siempre según las palabras de los profesionales, lo más recomendable en los adultos mayores es ducharse entre dos y tres veces por semana.
Para no renunciar a la higiene, la experta aconseja reforzar las duchas diarias con baños localizados en diferentes partes del cuerpo, como las axilas, los genitales, y entre los dedos de los pies.
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No todos los días: cada cuánto deben ducharse los adultos mayores, según experta
Además de cuidar la piel, ducharse también puede tener beneficios en la circulación sanguínea y el estado de ánimo de los adultos mayores. Por eso, es importante no descartar del todo esta práctica ya adaptarla a lo que dicen los especialistas.
Rutina de ducha en adultos mayores
Si eres un adulto mayor y vas a ducharte, es importante que respetes los puntos que se enumeran a continuación para cuidar tu salud más allá de la frecuencia:
- Temperatura del agua: asegurarse de que la temperatura del agua no sea demasiado caliente, idealmente entre 37°C y 38°C.
- Productos de higiene: usar productos de higiene personal neutros que no irriten la piel.
- Secado: secar el cuerpo con cuidado, prestando atención a zonas húmedas para prevenir hongos y dermatitis.
- Hidratación: aplicar una crema hidratante después de la ducha para mantener la piel sana.
- Ayuda si es necesario: pedir ayuda para entrar y salir de la ducha si es necesario.
- Botón de emergencia: considerar instalar un botón de emergencia en caso de necesidad.
- Tiempo de ducha: la ducha no debe durar más de 10 minutos.
- Limpieza y desinfección: limpiar y desinfectar la zona de la ducha después de cada uso.