Cada vez son más las personas que buscan la solución a sus problemas del hogar en un truco simple de abuela. Los trucos son herramientas caseras que se utilizan para arreglar, limpiar o reutilizar sin necesidad de gastar de más.
Cada vez son más las personas que buscan la solución a sus problemas del hogar en un truco simple de abuela. Los trucos son herramientas caseras que se utilizan para arreglar, limpiar o reutilizar sin necesidad de gastar de más.
Lo mejor de los trucos es que llevan pocos ingredientes, naturales y que normalmente tienes en casa. Para cada problema existe un truco y los cabellos del cepillo no son la excepción. Cuando nos cepillamos el pelo siempre quedan restos de cabello pegado que se acumula y ensucia el objeto.
En los meses de otoño o cambios estacionales muy marcados el cabello se cae más. Esto se debe a que, al igual que la mayoría de las cuestiones biológicas, a que el cabello cumple un ciclo de crecimiento para finalmente caer. Esto no significa que la caía en exceso es esperable y normal, siempre es bueno consultar a un dermatólogo.
Mientras tanto, puedes recurrir a este truco casero de abuela que permite retirar los cabellos rápidamente del cepillo utilizando un ingrediente. Queda limpio, como nuevo y listo para otro uso.
Recientemente encontré en el libro de soluciones caseras de mi abuela un pequeño truco desconocido y impresionante perfecto para quitar los cabellos del cepillo, o mejor dicho, perfecto para que ni siquiera se queden pegados.
Para este truco necesitas un sólo ingrediente o elemento: toallitas húmedas. Simplemente debes colocar una toallita húmeda atravesando las cerdas del cepillo y llevarla hasta abajo, para que cubra toda la parte de la goma donde van pegadas las cerdas. Luego puedes cepillar tu cabello con normalidad.
Los cabellos quedarán pegados en el ingrediente gracias a la humedad del mismo. Lo bueno es que puedes reutilizar las toallitas o incluso reemplazarlas con servilletas de papel.
Existe un truco para desinfectar los cepillos del pelo y eliminar toda la suciedad. Aunque no lo creas, el cepillo junta grasa y suciedad del pelo. Solucionar esto es muy sencillo, solo necesitas dos ingredientes: bicarbonato de sodio y agua.
Coloca en una olla grande agua caliente con dos cucharadas de bicarbonato de sodio y sumerge los cepillos de cabello. Deja hervir por unos 15 minutos o hasta que notes el agua muy oscura. Retira los cepillos, déjalos secar con la ventilación del ambiente y listo, impecables para ser usados.