Se trata de una lujosa domus romana, que data entre la segunda mitad del siglo II a. C. y finales del siglo I a. C., esta pertenecía a una familia senatorial, tiene de todo: un salón de banquetes donde hacían juegos de agua, paredes decoradas y un mosaico único que combina conchas, piedras preciosas y mármoles, con escenas de barcos y paisajes marítimos.
Pero eso no es todo, también hallaron materiales de África e Irán, mostrando que los romanos estaban mucho más conectados con otras culturas de lo que pensábamos. Este descubrimiento que fascina a la arqueología no solo confirma lo que se decía de las grandes casas del Palatino, sino que también nos deja con ganas de saber qué otros secretos esconde la historia de Roma.
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Imperio romano: ¿qué es el coliseo romano?
El Coliseo Romano, también conocido como Anfiteatro Flavio, es uno de los monumentos más icónicos de la antigua Roma. Construido entre los años 70 y 80 d.C. bajo los emperadores Vespasiano y Tito, fue el escenario principal de espectáculos públicos como combates de gladiadores, cacerías de animales exóticos y ejecuciones del imperio romano.
Con capacidad para albergar entre 50,000 y 80,000 espectadores, el Coliseo es un ejemplo de la avanzada ingeniería y arquitectura romana, con sus arcos, vomitorios y sistemas subterráneos. Este anfiteatro, ubicado en el corazón de Roma, no solo refleja el poder del Imperio Romano, sino que también sigue siendo un símbolo de su legado cultural y arquitectónico.