Comer sabroso

Crema catalana, la receta del típico postre de España que se logra en 15 minutos

Si quieres comer algo dulce, pero no perder mucho tiempo en elaborarlo, te traemos la mejor receta de España

No importa si las temperaturas son altas o bajas, un buen dulce siempre es bueno tras el almuerzo o la cena. Si eres de esas personas que adoran esta idea, puedes optar por una receta fácil y rápida que proviene de España y endulzará tus días siempre que lo elabores.

En este caso, estamos hablando de la crema catalana que se puede llevar a cabo en pocos pasos y en un total de 15 minutos. Además, no hace falta una extensa lista de ingredientes para poder probar un postre típico, sabroso y que todos deberían probar.

Receta de crema catalana

La cocina catalana es sumamente conocida en el mundo entero por la variedad e intensidad de sus sabores. Aunque las recetas calientes suelen ser las más llamativas, también hay postres y la crema catalana es una de ellas.

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Parece una receta demasiado trabajada, pero la crema catalana es una crema pastelera que tiene el huevo como base y suele tener azúcar caramelizado por encima que le otorga un contraste crujiente dentro de la boca.

En marzo, precisamente el día 19, es costumbre comer este postre de Cataluña porque se celebra el día de San José. Según se conoce, la receta original surgió en época medieval y llevaba pan, huevos y leche hervida, pero luego se desarrolló hasta dar como resultado la crema catalana.

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Los ingredientes para la crema catalana son:

  • 1 litro de leche
  • 1 rama de canela
  • Piel de un limón
  • 8 yemas de huevo
  • 150 gr de azúcar
  • 30 gr de maicena
  • 4 cdas de azúcar para caramelizar

Elaboración de esta receta

Por suerte para los amantes de lo dulce, este postre de España es muy fácil de lograr y lleva poco tiempo y pocos pasos:

  1. Calentar a fuego medio la leche con la canela y la piel de limón. Retirar del fuego cuando rompa hervor y colar.
  2. Batir la maicena y las yemas con azúcar en un bol hasta que tome color blanco. Sumar la leche sin parar de batir.
  3. Calentar nuevamente hasta que espese. Verter en cazuelas y dejar enfriar.
  4. Por último, espolvorear azúcar y quemar por encima.

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