Para tener en cuenta

Cómo usar la planta de menta para evitar el insomnio por las noches: truco casero efectivo

La planta de menta puede ser utilizada para dejar atrás el insomnio. Todo esto, gracias a sus propiedades

El insomnio es definido como un trastorno del sueño que se caracteriza por la dificultad para conciliar o mantener el sueño, o por despertarse demasiado temprano y no poder volver a dormir. Ya instalado en muchas personas, lo cierto es que se busca ponerle fin al mismo mediante distintos elementos caseros, y uno de ellos es la planta de menta.

La menta es efectiva contra el insomnio por sus propiedades relajantes y sedantes, que calman el estrés y la ansiedad, y su efecto antiespasmódico que relaja los músculos.

Insomnio.jpg
El insomnio es uno de los trastornos de sueño más famosos.

El insomnio es uno de los trastornos de sueño más famosos.

Cómo usar la planta de menta para evitar el insomnio por las noches

Para usar la menta contra el insomnio, prepara una infusión de menta fresca o seca, déjala reposar unos 5 a 10 minutos y bébela tibia antes de dormir para aprovechar sus efectos relajantes. Puedes potenciar este truco casero con otras hierbas o hábitos particulares.

Al abordar tanto el estrés mental como la tensión física, la menta puede contribuir a una noche de sueño más reparador y profundo.

Además de beber una taza, puedes realizar la denominada aromaterapia. Inhalar el aceite esencial de menta también puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.

menta, hogar, beneficios.jpg
Con esta infusión de menta, puedes lograr grandes beneficios.

Con esta infusión de menta, puedes lograr grandes beneficios.

Si tienes alguna condición médica o estás tomando medicamentos, consulta a un profesional de la salud antes de consumir tés de hierbas de forma regular para evitar problemas.

A la hora de hablar de momentos precisos, tienes que saber que se recomienda beber la infusión unos 30 o 60 minutos antes de acostarte a dormir.

Cómo preparar la infusión con menta para decirle adiós al insomnio

  • Hojas frescas: lava bien entre 3 y 4 tallos o un puñado de hojas de menta fresca. Colócalas en una taza y añade agua hirviendo.
  • Hojas secas: usa una o dos cucharaditas de hojas secas por cada taza de agua.
  • Hierve el agua: si usas hojas frescas, puedes hervirlas directamente en el agua durante un par de minutos; si usas hojas secas, se recomienda no hervirlas, sino verter el agua caliente sobre ellas para no alterar sus propiedades.
  • Reposo y colado: deja reposar la infusión unos 5 a 10 minutos. Luego, cuela las hojas antes de beber.