Para ello, hay un truco casero muy fácil y al alcance de la mano. Se trata de poner la botella de otra forma distinta a la convencional para que su gas no se escape.
El truco casero para que la gaseosa no pierda su gas
Cuando guardes la botella de gaseosa, en vez de hacerlo como siempre, deberás guardarla boca abajo en la heladera:
El truco para que el gas de la gaseosa no se pierda.jpg
Esto hará que el líquido queda en contacto con la tapa, lo que crea un sello natural que impide que el gas escape fácilmente. Además, se reduce la cantidad de aire en la parte superior, y eso disminuye la presión que empuja al gas hacia fuera.
La tapa es fundamental en este truco, ya que queda completamente sumergida, lo que evita que pequeñas fugas permitan la salida del gasificado.
En combinación con el frío del refrigerador, que también ayuda a conservar el gas por más tiempo, este truco puede hacer que la gaseosa se mantenga con gas durante varios días después de abierta.
Este truco funciona con: gaseosas comunes (cola, naranja, limón, etc.), aguas saborizadas con gas, soda embotellada y cerveza.