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Ciencia médica: cuándo utilizar compresas calientes o frías y qué dolores combaten

Entre los remedios caseros más comunes, se encuentran las compresas que se usan sobre zonas de dolor o inflamación. ¿Cómo se deben utilizar según la ciencia?

Más allá de la cantidad infinita de medicamentos que existen alrededor del mundo, los remedios naturales y caseros suelen ser la primera opción a la que acuden las personas cuando tienen alguna dolencia o malestar relacionado con la salud física. En este caso, el foco está puesto en las compresas que suelen usarse en frío o caliente.

Aunque no lo parezca, en muchas ocasiones los remedios naturales tienen explicaciones científicas a las que los médicos han llegado a través de estudios. Ahora, te explicaremos que efecto tienen los dos tipos de compresas -frías y calientes- y para qué situaciones se deben usar.

Qué son las compresas

No es nada complicado, una compresa se logra con un paño de material absorbente que se ubica sobre una región afectada del cuerpo con temperaturas altas o bajas de acuerdo a las necesidades. En algunas ocasiones, si es recomendado por un especialista, se suman medicamentos para la cobertura de una herida o algo similar.

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En las farmacias, están a la venta las compresas de algodón, telas o algunas con gel. Sin embargo, en la casa se pueden obtener con cualquier paño de tela y materiales dentro que estén relacionados con la disminución de las dolencias como frijoles, vinagre o arroz.

Cómo usar las compresas

Aunque las compresas caseras son una solución rápida a los dolores, muchas personas no saben en qué situaciones se debe usar la compresa fría o caliente. Aquí encuentra la respuesta.

Las compresas frías son clave para disminuir el flujo sanguíneo de una región particular en el cuerpo, por lo tanto, también desinflaman y reducen el dolor. Entre sus usos correctos se encuentran:

  • Hematomas
  • Aliviar el dolor de muela
  • Tendinitis
  • Desinflamar un golpe
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Para crear una compresa fría en casa basta con envolver una bolsa de guisantes congelados con tela y colocarla sobre la región que duela durante 20 minutos. Otra opción es mezclar una parte de alcohol y dos de agua en una bolsa con cierre ziploc y congelar.

Por otro lado, las compresas calientes sirven para aumentar la movilidad de una región del cuerpo y ayuda a relajar el músculo. Usa compresas calientes para:

  • Tortícolis
  • Forúnculo y orzuelo
  • Aliviar dolor muscular
  • Disminuir dolor menstrual

En este caso, la compresa caliente se logra con granos de arroz o frijoles en una media o funda. Calentar durante 3 0 5 minutos en el microondas bastará para que haga efecto sobre la zona adolorida.

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