El que inauguró la lista fue Luis Edgardo Spampinato, defensor civil de Pobres y Ausentes de San Martín, que renunció el 30 de diciembre de 2019. El vigésimo y último, hasta ahora, es Jorge Nanclares, que dimitió el lunes 1 de junio al cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia.
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Spampinato y Nanclares son parte de la nómina de veinte magistrados que decidieron irse del Poder Judicial desde que Rodolfo Suarez llegó a la Gobernación de Mendoza.
Todos, sin excepción, lo hicieron para jubilarse y efectivamente esperan que ANSES les liquide el primer haber de retirado para alejarse de la función.
La mayoría presentó su nota de salida en marzo y abril con los albores del aislamiento social.
Mientras, siguen en actividad. Muchos de ellos vía remota porque son personas en riesgo de contraer coronavirus.
La gran mayoría se retira para zafar de la nueva ley de jubilaciones, que les significaría percibir mensualidades más bajas cuando sean parte de la clase pasiva. Y porque una nueva normativa que rige desde mayo les cortó otro ingreso: el ítem antigüedad, que era acumulativo.
Un repaso por la nómina revela que hay jueces laboralistas y penalistas. También civilistas y hasta una fiscal de la Unidad de Tránsito.
Algunos de los salientes desempeñaron sus labores en el Gran Mendoza; otros en San Martín y San Rafael. Dos son de Tunuyán.
Nombres públicos
Porque sus nombres alcanzaron cierta trascendencia pública vale la pena mencionar a Oscar Balmes, el juez de Garantías del caso que sacudió al Valle de Uco y que irá a juicio oral y público en fecha a determinar: el crimen de la empresaria de Tunuyán Susana Carleti.
También Gonzalo Guiñazú integra ese lote de jueces emblemáticos, ya que en los ´90 investigó y esclareció el denominado Crimen del Parque y, en los últimos años, entre otras causas, condenó a homicidas, asaltantes y abusadores sexuales.
Otro saliente es Jorge Luis Del Pópolo, que condenó a Luis Lobos y señora a prisión, en 2019, por fraude con fondos públicos; sentencia que está en revisión en la Suprema Corte.
Rodolfo Casetti puede sonar desconocido en el Gran Mendoza, sin embargo durante muchos años tuvo múltiple competencia en Tunuyán porque ha sido juez laboralista, de paz y del fuero tributario.
Carlos Díaz tuvo alta exposición pública porque condenó a dos curas y un civil por los abusos sexuales en el Próvolo de Luján; Coussirat integró el tribunal suplente.
Uno por uno
. Luis Edgardo Spampinato, defensor civil de Pobres y Ausentes de San Martín. Renunció el 30 de diciembre de 2019.
. Mónica Arroyo, jueza de la Tercera Cámara Laboral del Gran Mendoza. Presentó la renuncia el 6 de enero de 2020.
. María Alejandra Ferrer, asesora de Menores de Tupungato. Dimitió el 6 de enero de 2020.
. Gonzalo Guiñazú, juez del tribunal penal colegiado. Renunció el 13 de marzo de 2020.
. Lucía Motta, jueza penal de primera instancia. Dimitió el 11 de mayo.
. Jorge Coussirat, juez de sentencia. Renunció el 13 de marzo.
. Carlos Díaz, juez de sentencia. Presentó su renuncia el 13 de marzo.
. María Lizán, jueza de Familia de Las Heras. Renunció el 19 de mayo.
. Jorge Panebianco, juez laboralista de la Primera Cámara de San Rafael. Dimitió el 11 de mayo.
. Jorge Luis Del Pópolo, juez de sentencia. Dimitió el 3 de abril.
. Liliana Giner, fiscal de la Unidad de Delitos de Tránsito. Renunció en abril.
. María Mercedes Herrera, jueza civil. Renunció el 3 de abril.
. Víctor Hugo Comeglio, juez de sentencias. Renunció el 3 de abril.
. Oscar Balmes, juez instructor. Renunció el 15 de abril.
. Adriana Gurgui, del Primer Juzgado de Familia San Martín.
. Juan Carlos Gadadi, defensor Oficial de San Martín.
. Mónica Araujo, jueza contravencional.
. Ana María Salas, jueza de la Séptima Cámara Laboral.
. Rodolfo Casetti, juez de Trabajo, De Paz y Tributario de Tunuyán,
. Jorge Nanclares, ministro de la Suprema Corte de Justicia.