"Lo vi quedarse sin vida y es fuerte. Era mi mejor amigo". Las palabras entrecortadas salieron de la boca de la hija de Antonio Alberto Chiófalo, el hombre de 51 años que murió en la madrugada de este viernes al ser baleado en la casa de su padre en Las Heras. La familia regresaba este viernes a Canadá, pero la vuelta se vio frustrada por el aberrante crimen.
Desde el 23 de diciembre que Chiófalo se encontraba en Mendoza junto a una de sus hijas, su nieta de 10 años y su pareja. La familia viajó desde Canadá para pasar las fiestas con el padre del hombre y el resto de los familiares, pero nunca imaginaron que todo terminaría con un saldo fatal. "No se por qué pasó esto. No lo entiendo", afirmó su hija -pidió reservar su identidad-.
"Estábamos durmiendo cuando escuchamos un tiro. Mi hija me fue a buscar a la pieza porque mi papá estaba herido. Le salía sangre y tenía un tiró acá", detalló, mientras se señalaba el corazón. "Se ahogaba con su propia sangre. No pude hacer nada. Le sentí el último suspiro", recordó la mujer de 32 años.
Como la víctima fatal, su hija y su nieta pasaban todo el año en Canadá, excepto cuando viajaban a Mendoza por las Fiestas, no encuentran explicación al hecho. "No se qué creer. No le deseo esto a nadie. Conozco que hay mucha inseguridad en Argentina y también injusticia en Mendoza, pero vamos a luchar para que se resuelva", dijo la mujer, nacida en el país de Norteamérica.
Los familiares se encontraban esperando recibir el cadáver del hombre para prepararlo en una casa de sepelios y luego enviarlo a Canadá, donde será enterrado.