Revés judicial

Dos detenidos por el caso de los hermanos Álvarez pidieron la libertad pero les fue negada

Fabián D'agostino y su hijo Axel, imputados por el doble crimen en Maipú de los hermanos Álvarez, intentaron salir del penal a través de un control de una jueza

La investigación por el doble crimen en Maipú de los hermanos Álvarez ha ingresado en una profunda batalla judicial. El expediente tiene cuatros detenidos que han ido presentando distintos recursos procesales en busca de recuperar su libertad, pero dos de ellos ya recibieron un revés judicial este martes.

Los abogados de Fabián D'agostino (51) y su hijo Axel (21) presentaron un control jurisdiccional, que es una medida para que un juez revise las condiciones de detención. Minutos después del mediodía de este martes, la jueza María Alejandra Mauricio consideró que los D'agostino deben continuar privados de su libertad y también negó la posibilidad de un arresto domiciliario.

En los próximos días se retomarán las audiencias por el caso de los hermanos Álvarez ya que también están imputados Luis (37) y Omar (37) Andrada. Justamente la defensa de este último pidió que sea declarada nula la declaración de su propio hijo, quien es un testigo clave para la fiscal de Homicidios Andrea Lazo ya que confirmó que había problemas anteriores entre los sospechosos y las víctimas fatales.

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Los D'agostino, detenidos por el doble crimen en Maipú.

Los D'agostino, detenidos por el doble crimen en Maipú.

Crimen en Maipú

Luciano y Franco Álvarez, de 18 y 28 años, salieron de su casa en Colonia Bombal en la tarde del lunes 7 de junio. A su madre le dijeron que debían dirigirse hasta Los Corralitos para cobrar un trabajo de albañilería. El menor de ellos le avisó por mensaje cuando habían cobrado el dinero, pero luego su teléfono se apagó y no se supo nada más de ellos.

El paradero de los hermanos Álvarez fue un misterio hasta que una mujer encontró sus cuerpos en la laguna del Viborón el 27 de junio. Al día siguiente fueron detenidos los D'agostino y los Andrada, quienes también trabajaban en la obra en construcción con las víctimas fatales.

La fiscal de Homicidios Andrea Lazo los imputó por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas, por lo que arriesgan una pena de prisión perpetua.

La magistrada no sólo cuenta con el testimonio del hijo de Omar Andrada, sino que un primo de los hermanos Álvarez declaró y también ratificó que llevó a los jóvenes a cobrar el dinero a la casa de D'agostino y constantemente había conflictos. Incluso detalló que Franco Álvarez solía llevar un cuchillo cuando acudía a ese domicilio.