Con diversos puestos de control en donde se realizan cacheos a los pasajeros de ómnibus y combis, está en marcha el riguroso operativo de seguridad para el superclásico de este sábado por la noche entre Boca y River, que se jugará desde las 22.10 en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza.
Roberto Munives, director general de la Policía de Mendoza, informó a Télam este mediodía que uno de los vallados policiales fue instalado en Desaguadero, en el puesto que controla el ingreso de vehículos desde San Luis, Córdoba y Buenos Aires por la ruta nacional 7.
El otro control y cacheo está ubicado en el límite entre Mendoza y San Juan, por la ruta 40, que concentra el tránsito de los micros y autos que llegan desde esa provincia y las del norte del país.
Munives remarcó que "son 1.200 policías de Mendoza afectados al operativo, más los integrantes de los puestos fronterizos y los que realizan recorridas por las rutas". Además, otros 300 efectivos de la Policía Federal y la Gendarmería Nacional participan del operativo.
El funcionario indicó que "los micros en donde viajan los integrantes de ambas hinchadas serán encapsuladas por vehículos policiales y serán conducidas directamente a la zona del estadio", ubicado en el arbolado Parque General San Martín de la capital mendocina.
En la zona del parque, en las adyacencias al estadio Malvinas Argentinas, habrá dos cordones policiales, en los cuales se pedirán las entradas y se hará un cacheo riguroso. La Policía mendocina advirtió que quienes no muestren su entrada no podrán acercarse al estadio, ya que no se les permitirá pasar el primer cordón de control.
En ese marco, cabe señalar que el fuerte sol del mediodía mendocino (tras una lluvia intensa que cayó durante la madrugada y el amanecer) obligaba a los pasajeros de los micros y combis a buscar refugio bajo los árboles, a la espera de los cacheos y controles antes de seguir viaje rumbo al estadio mundialista de Mendoza.