"Sé que mucha gente se ha ofendido, lo ha tomado a mal, sé que molestó, me están llamando de todos lados", agregó Fernández, quien reconoció que recibió amenazas en su teléfono.
"Jamás pensé que la iban a subir o pasar a un grupo o que la viralizaran; por eso pido disculpas a todo el mundo públicamente y a Claudia, a toda la familia Maradona, a toda la gente y a la cochería, que no tiene la culpa de esto", cerró.
El protagonista de la otra fotografía era Diego Molina, también ex empleado de la casa de sepelios y a quien además Argentinos Juniors expulsó como socio del club.
Molina publicó una fotografía de él parado al lado del cajón abierto donde descansan los restos de Maradona, poniendo el pulgar de su mano izquierda para arriba y con la mano derecha sobre la frente del astro argentino.
La actitud fue condenada rápidamente a través de las redes sociales y el abogado Matías Morla fue quien publicó una foto del empleado en su cuenta oficial de Twitter.
"Diego Molina es el canalla que se sacó una foto junto al féretro de Diego Maradona. Por la memoria de mi amigo no voy a descansar hasta que pague semejante aberración", indicó el letrado en la citada red social.