El slalom gigante de Alta Badia de esquí dejó sorpresas en la previa de Navidad. Marco Odermatt sigue siendo el gran líder de la Copa del Mundo, pero cuando el trazado se vuelve más técnico, el margen se achica y aparecen otros nombres capaces de marcar la diferencia.
Las clasificaciones muestran dos realidades bien distintas. En la general, Odermatt se escapa con 805 puntos, más del doble que su perseguidor inmediato, Marco Schwarz (351). También aparecen Henrik Kristoffersen (326) y Lucas Pinheiro Braathen (313), todos peleando entre ellos, pero muy lejos del suizo. A esta altura de la temporada, la lucha por la esfera grande parece cerrada.
En el slalom gigante, en cambio, la historia es otra. Con 5 de las 9 carreras disputadas, Stefan Brennsteiner volvió a ponerse la pechera roja con 305 puntos, apenas cinco más que Odermatt. Schwarz, Kristoffersen y Vinatzer siguen muy cerca, en una especialidad que promete dar pelea hasta el final.
El resultado en Alta Badia resume a la perfección lo que fue la prueba. Marco Schwarz ganó, Lucas Pinheiro Braathen quedó a las puertas de otra victoria a solo 18 centésimas, mientras que Stefan Brennsteiner quedó tercero a 22.
La segunda manga de Odermatt no le dejará un buen recuerdo. Salió a recuperar, empujó en la parte alta y trató de volver a meterse en la pelea en el sector central, pero el trazado no lo acompañó. Los diseños, más cerrados y menos rápidos que de costumbre, le exigieron una paciencia que no pudo encontrar y quedó a 82 centésimas.
El suizo cortó una racha impresionante: sacando abandonos, no se bajaba del podio en un gigante desde marzo de 2021. Esta vez fue sexto. Sigue siendo el número uno, pero necesita sumar si quiere mantenerse en la lucha del gigante.
La Copa del Mundo sigue y el próximo capítulo ya asoma en Livigno, después del slalom. La temporada avanza y la lucha por el slalom gigante va a dar mucho que hablar en las próximas semanas.






