Los faros de un automóvil son cruciales para la seguridad y el funcionamiento del vehículo, pero con el tiempo pueden deteriorarse y perder su brillo original. Esto puede ser un problema, ya que unos faros desgastados no solo afectan la estética del automóvil, sino también su capacidad para iluminar adecuadamente la carretera durante la noche. Afortunadamente, existe un truco simple que puede revitalizar los faros y hacer que luzcan como nuevos que requiere de un solo componente: el agua oxigenada.