La sensación de inseguridad se midió en Mendoza también respecto de la percepción que tiene el mendocino en distintos lugares e instituciones.
La calle sigue percibiéndose como un lugar peligroso. Si bien el temor a caminar por la vía pública bajó respecto del 2017, sigue siendo lo que se percibe como más riesgoso, ya que en la encuesta el 70,6% coincidió en eso y el 67,2% le dio el marco de caminar sólo en el barrio y de noche.
Pese a que en varios lugares como el parque General San Martín se colocaron cámaras de seguridad y en otros parques se incrementó la presencia policial, los espacios verdes siguen siendo inseguros para el 58,6% de los encuestados, aunque eso también bajó respecto del año pasado cuando el porcentaje alcanzó el 68,8%.
Sin embargo, lo que más llama la atención de los analistas de seguridad es la caída de la imagen de la escuela como una institución en la que los mendocinos se sentían seguros.
Imágenes de un video en el que se ve a un alumno de 14 años golpeando sin control e insultando a un profesor en un colegio de Tunuyán u otras en las que algún estudiante llevó un arma al aula, tal vez expliquen por qué el colegio dejó de representar un lugar seguro para quienes comparten ese espacio a diario.
En la encuesta de victimización la institución educativa pasó de tener el 21,5% entre los mendocinos que se sentían inseguros en ella en el 2016, a recibir el 23,6% en los resultados de los consultados en 2017. Para estos últimos es menos inseguro estar en el trabajo (23,3%) o dentro de su casa (21,8) que en el colegio.