La Justicia confirmó la detención de Claudio Adrián Villalba, el joven de 18 años que conducía en estado de ebriedad y atropelló a Jorge Quiroga (51) quitándole la vida en el acto.
Este jueves se dictó la preventiva contra el imputado por homicidio simple con dolo eventual y lesiones. Además de que continúe el penal, es importante que el juez Federico Martínez mantuvo esa calificación que eleva la escala penal de 8 a 25 años de cárcel.
El magistrado se inclinó por los argumentos que esgrimió el fiscal de Tránsito Fernando Giunta hace una semana. Para el investigador está claro que Villalba sabía que sus acciones podían desembocar en consencuencias fatales.
Además de estar alcoholizado -tenía 1,30 gramos de alcohol en sangre-, circulaba a exceso de velocidad y todavía no se había sacado el carnet de conducir -había cumplido 18 años casi un mes antes-.
El juez desestimó el pedido del abogado defensor Lucas Soler quien reclamó que la calificación cambie a homicidio culposo agravado y, al tratarse de un delito excarcelable, recupere su libertad.
Trágico
El 10 de febrero pasado, cerca de las 8.30, Jorge Quiroga (51) había salido de trabajar y se encontraba esperando un micro para regresar a su casa. Estaba parado en la intersección de ruta 30 y calle San Ramón. En ese momento fue atropellado por un VW Gol Trend y murió prácticamente en el acto.
El auto era manejado por Adrián Villalba, quien había cumplido 18 años el 16 de enero pasado. Estaba acompañado por una joven, quien sufrió graves heridas.
Según reconstruyó la Justicia, los jóvenes salieron del boliche Pecados en Lavalle y se dirigieron hasta el centro de Mendoza para dejar a algunos amigos. Luego Villalba regresó hacia Lavalle para llevar a su compañera, pero terminó desencadenando el violento choque.