Minutos después del mediodía se realizó una audiencia que estaba estipulada para definir las pruebas que se iban a ventilar en un juicio por jurado que estaba fechado para el próximo 26 de septiembre. Sin embargo, las partes le informaron al juez Horacio Cadile que había llegado a un acuerdo para cerrar el expediente con un juicio abreviado.
El fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello y el defensor oficial de Homicidios Ariel Brizzio pactaron que la acusada admita su autoría y sea condenada por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, por el vínculo trasnversal -la víctima era pareja de su exnovio- y por alevosía -atacó por la espalda, a traición, sin dar chance de defensa-. La asesina no recibió ningún beneficio a cambio, ya que la única pena que prevé ese delito es la prisión perpetua, más allá del hecho de no haber enfrentado a un jurado popular que definiera su suerte.