El presidente Donald Trump se encuentra reunido con su Consejo de Seguridad Nacional en medio de las crecientes tensiones en Medio Oriente, mientras Estados Unidos evalúa su posible entrada directa en el conflicto entre Israel e Irán. Un funcionario de la Casa Blanca confirmó la reunión convocada tras el regreso abrupto del mandatario desde la Cumbre del G7 en Canadá.

Trump abandonó prematuramente la cumbre internacional el lunes para atender personalmente la escalada situación, aunque descartó que su regreso a Washington estuviera relacionado con negociaciones de alto el fuego entre Jerusalén y Teherán. La decisión presidencial subraya la gravedad de la crisis regional y las implicaciones para la seguridad nacional estadounidense.

Ataque de Israel a la televisión de Irán1.JPG
Desde que Israel bombardeó instalaciones nucleares y objetivos militares iraníes el viernes pasado, ambos países intercambiaron ataques devastadores.

Desde que Israel bombardeó instalaciones nucleares y objetivos militares iraníes el viernes pasado, ambos países intercambiaron ataques devastadores.

Control sobre espacio aéreo Iraní

Donald Trump declaró este martes que Estados Unidos mantiene "control total de los cielos de Irán" debido a la superioridad tecnológica estadounidense en sistemas de rastreo aéreo. "Ahora tenemos control total sobre los cielos de Irán.

Irán contaba con buenos rastreadores aéreos y otros equipos defensivos, y en abundancia, pero no se comparan con los fabricados en Estados Unidos", escribió el republicano en Truth Social.

"Nadie lo hace mejor que Estados Unidos", agregó Donald Trump, enfatizando la ventaja militar tecnológica estadounidense en la región. Esta declaración marca un escalamiento retórico significativo en la postura de Estados Unidos hacia Irán durante la crisis actual.

Se intensifica la presión sobre Trump

Desde que Israel bombardeó instalaciones nucleares y objetivos militares iraníes el viernes pasado, ambos países intercambiaron ataques devastadores. En Irán murieron más de 200 personas, incluyendo numerosos civiles, mientras que los lanzamientos de misiles iraníes causaron 24 muertes en Israel.

Aunque Estados Unidos negó participación directa en los ataques israelíes contra la República Islámica, Donald Trump sugirió que la ofensiva se produjo porque venció el plazo que él impuso a Teherán para cerrar un acuerdo nuclear.

La situación coloca a Trump en una posición crítica, debiendo equilibrar el apoyo tradicional a Israel con los riesgos de una guerra regional más amplia que podría involucrar directamente a Estados Unidos en otro conflicto en Medio Oriente.

Temas relacionados: