Mientras que la inflación acumulada hasta mayo ha registrado un 20% en alimentos y bebidas, en lo que va del 2019, las carnes han sufrido subas por encima de esta cifra. De esta forma, ya registran incrementos de entre el 30% y el 40%.
En su último informe mensual -correspondiente a junio- la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes indicó que los movimientos de precios del primer semestre del año incluyen caídas y repuntes.
Según los datos del Mercado de Liniers, el precio promedio tuvo tres meses de descenso consecutivo en marzo (3%), abril (3,2%) y mayo (0,5%). Esto se dio tras dos grandes saltos durante el primer bimestre, con el 14,1% en enero y el 13% en febrero.
En junio, los cortes vacunos no mostraron grandes cambios con respecto a mayo, mientras que el pollo y el cerdo registraron bajas mensuales del 2,9% para el primero y del 2,7% en el segundo.
De este modo, en los últimos seis meses el precio de la carne de novillo se encareció 4,5% respecto al pollo y del 4,3% con relación al promedio de los cortes porcinos
José Rizzo, miembro de la Cámara de Abastecedores señaló que si bien el sector se ve afectado por los aumentos de tarifas, la caída en el consumo ha provocado que los comerciantes absorban los costos para incrementar las ventas y hacerle frente a las ofertas de los supermercados.
En cuanto al mercado interno, la caída en el consumo de carne vacuna durante el primer semestre fue del 12,2% si se toma como referencia el mismo periodo del 2018, esto significa unos 52,9 kilos per cápita.