La Justicia concursal de Mendoza decretó la quiebra de la conocida empresa de productos de copetín Gonzalo, que venía de atravesar graves problemas financieros cuyo desenlace fue una crisis sin salida.
Así lo resolvió la jueza Gloria Cortés, titular del 2do Juzgado de Procesos Concursales el último día hábil de febrero. De éste modo se abre la puerta para que el síndico designado empiece a trabajar en la liquidación de los bienes de la empresa.
Todo se precipitó rápido. Casi repentinamente para clientes y hasta sus propios empleados, a principios de diciembre había presentado el pedido de quiebra, que casi 3 meses después legalmente ya representa su desaparición.
En la medida, la jueza Cortés también dispuso el cronograma que la ley de Concursos y Quiebras obliga para estas instancias. Concretamente, informes contables previos a la liquidación de créditos laborales y pago a acreedores.
Abril y mayo, claves para la quiebra
Para la empresa familiar sostenida por 3 generaciones es sin dudas el final más triste. En particular porque en 2025 Gonzalo cumplía 73 años de vida.
Respecto a la quiebra y consecuente liquidación de activos, hasta el 21 de abril estará a disposición de los interesados el informe inicial sobre la situación contable-financiera y los activos de la empresa elaborado por el síndico Oscar Benaroya.
Mayo será clave: el 7 es el último día para que los acreedores presenten a la sindicatura pedidos de verificación de créditos (lo que deben cobrar). Y hasta el 21 de mayo, los empleados deberán hacer lo mismo con los llamados créditos laborales.
Es paso debe cumplirse para que la magistrada dicte una resolución de procedencia de esos créditos, lo que incluye derecho a "pronto pago". Y sobre todo comprometer a la empresa fallida a el modo de efectivización.
Liquidación: un proceso de más de un año
Sin embargo, llegar al final del camino llevará mucho más tiempo.
Es que desde fines de mayo tanto el deudor, es decir, los responsables de Gonzalo, como sus acreedores tendrán tiempo de presentarle al síndico las impugnaciones y observaciones a las solicitudes presentadas que permite la ley.
En base a esa etapa, la sindicatura contará con al menos un mes más para que informe a la jueza los resultados.
De ahí en más, recién el 28 de julio Cortés emitirá su dictámen sobre los pedidos de los acreedores de la empresa.
Pero, claro, el proceso todavía tendrá entonces un largo trecho por delante. Es que recién con el informe final del síndico (no antes de fines de agosto) aún habrá un márgen de dos semanas para que los interesados hagan observaciones.
Así, todo indica que la liquidación de bienes de Gonzalo se dilatará. Y difícilmente se concrete antes de terminar el año 2025.




