En el norte de Marruecos está Chefchaouen, una pequeña ciudad que podría bien ser llamada "el sueño azul", ya que su parte más antigua hay casas y calles pintadas con todos los matices de ese color.

Un pueblo azul como de cuento de hadas

Por UNO

La tradición de pintar las casas de azul fue adoptada por los refugiados judíos que creían que cuando más ves ese color, es más fácil recordar el cielo, y más específicamente, pensar en Dios. El tiempo pasó pero la tradición se quedó para convertirse en uno de los rasgos más emblemáticos de algunos barrios de la ciudad.

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Cualquier color resalta en semejante pasisaje. 
Cualquier color resalta en semejante pasisaje. 
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Todo todo es azul..
Todo todo es azul..
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Realmente nos invita a recorrer sus calles.
Realmente nos invita a recorrer sus calles.
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Hasta las puertas de las casa son azules.
Hasta las puertas de las casa son azules.